En un comunicado, Gestha lamentó que los grandes equipos de fútbol no practiquen el ‘fair play’ tributario y puso como ejemplo el hecho de que Hacienda investigue los pagos realizados por el FC Barcelona a la Fundación Leo Messi entre los años 2010 y 2013 y que la Unidad Central Operativa (UCO) solicitó investigar al futbolista argentino en ocho países diferentes.

Sobre la posibilidad del descenso de categoría, el sindicato exige que se aplique este castigo a los clubes que defrauden a Hacienda, sin reservarles la posibilidad de mantenerla por el simple hecho de presentar declaraciones complementarias.

En este sentido, Gestha recordó los precedentes de los descensos administrativos de equipos como el Elche o el Murcia por no pagar sus deudas e incumplir el ‘fair play’ financiero aprobado por la Ley del Deporte, que en 2012 incluyó un protocolo firmado por el Consejo Superior de Deportes (CSD) y la Liga de Fútbol Profesional (LFP) para reducir las deudas tributarias de los equipos, que todavía superan los 250 millones de euros.

Por otra parte, los técnicos de Hacienda precisaron que esta propuesta de nuevas sanciones deportivas se aplicaría sólo en el caso de que no se impusiera a los clubes una sanción tributaria o una condena penal definitiva por los mismos hechos. Por tanto, la sanción deportiva sería aplicable cuando el club presente declaraciones complementarias, espoleado por una investigación tributaria o penal cercana o por informaciones reservadas que se hayan hecho públicas.

TRATO DE FAVOR

En la misma línea, Gestha lamentó el “trato de favor y condescendencia que recibe el fútbol por parte de las administraciones” y recordó que la tributación en el Impuesto de Sociedades del FC Barcelona, Real Madrid, Athletic de Bilbao y Atlético Osasuna es “discriminatoria y más favorable” que la del resto de los clubes que son sociedades anónimas deportivas (SAD).

Sobre este tema, Gestha explicó que la ley permite que estos cuatro clubes deportivos sean considerados entidades sin ánimo de lucro, por lo que están parcialmente exentos del Impuesto sobre Sociedades y pueden tributar por sus ingresos comerciales a un tipo reducido del 25%, es decir, entre 5 y 10 puntos menos que el tipo general del 35% hasta 2006, del 32,5% en 2007 y del 30% de 2008 a 2014.

En este mismo sentido el sindicato añade “las ayudas públicas directas o indirectas que recibe el fútbol, como la asunción de deudas, la publicidad institucional, el permiso para acumular deudas tributarias pendientes de pago hasta los 752 millones en 2011, la ‘Ley Beckham’…”.

Según el secretario general de Gestha, José María Mollinedo, “la contribución de impuestos y las estrategias fiscales de los clubes, como las de cualquier gran empresa, deberían ser totalmente transparentes y de conocimiento público. Y cuando se detecte un caso de fraude fiscal, el equipo implicado no sólo tendría que rendir cuentas ante Hacienda, sino también ante sus aficionados, por lo que la pérdida de puntos en la clasificación e incluso el descenso de categoría podría contribuir a erradicar el fraude en el mundo del fútbol”.