Estas son las conclusiones principales del último resumen climatológico mensual de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), difundido este viernes por el Ministerio para la Transición Ecológica.

Marzo tuvo una media de temperaturas máximas que superó en 0,4ºC al anterior registro más alto, de 2012. Este dato indica que ha hecho más calor de lo habitual en las horas centrales del día al situarse, puesto que los entonces termómetros maercaron 1,8ºC más de lo normal teniendo en cuenta como periodo de referencia el comprendido entre 1981 y 2010.

La media de las temperaturas mínimas, que suelen darse a últimas horas de la madrugada o poco después del amanecer, se quedó 0,5ºC por debajo de los valores de referencia, lo que favoreció la formación de abundantes episodios de heladas en ambas mesetas. Destacan los 26 días de helada registrados en Molina de Aragón (Guadalajara) o las 21 jornadas en Teruel.

La combinación de ambos factores generó un marzo con una notable oscilación térmica diurna (2,3ºC superior a la normal), pero con una temperatura media que tan solo se situó 0,7ºC por encima de la media de este mes.

UN MES MUY SECO

Por otro lado, marzo fue un mes muy seco en el conjunto de España, al registrar una precipitación media de 26 litros por metro cuadrado, esto es, el el 55% de la media de este mes, que es de 47 litros por metro cuadrado entre 1981 y 2010. De esta forma, queda calificado como el segundo marzo menos lluvioso de este siglo, sólo por detrás del de 2012.

En marzo no llovió ni el 25% de lo normal en una extensa área que abarca Cataluña y el norte de Aragón, y pequeñas zonas al norte y sur de Mallorca, el norte de la provincia de Toledo, el oeste de Huelva y el sur de Cádiz. En concreto, en gran parte de Cataluña la precipitación mensual no superó los 5 litros por metro cuadrado.

La calificación de mes muy seco unido al de una media de las temperaturas máximas más elevada de lo habitual parece sugerir que marzo no ha sido un mes propicio para la nieve. Y así lo demuestran los datos de la reserva de nieve a finales de mes (día 26), cuando las cantidades acumuladas se asemejaban a las que había a principios de junio del año pasado o a mediados de mayo teniendo en cuenta el promedio de los últimos cinco años.