Según explicó la compañía, el contrato se ha dividido en dos lotes, de forma que uno hace referencia a la red convencional y ha sido adjudicado a Veolia por 5,9 millones de euros, mientras que el lote para el suministro en la red de Alta Velocidad se ha adjudicado a la misma empresa por 5,7 millones de euros.

En concreto, el objeto del contrato es el suministro en régimen de pedido abierto de baterías, en función de las necesidades que se detecten, para la alimentación ininterrumpida de diversas instalaciones de seguridad ferroviaria, tales como enclavamientos electrónicos, sistemas de señalización, equipos informáticos asociados y alumbrado de emergencia.

Adif explicó que estas instalaciones reciben la alimentación eléctrica desde la catenaria, red o grupo electrógeno y que, en caso de fallo o interrupción en el suministro de la alimentación de energía, son necesarios Sistemas de Alimentación Ininterrumpida compuestos por baterías que aseguran el funcionamiento de los sistemas de señalización, enclavamientos y alumbrado de emergencia en líneas ferroviarias y edificios técnicos.

Por último, la compañía señaló que esta actuación podrá ser cofinanciada por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) y por el Mecanismo ‘Conectar Europa’ de la Unión Europea (CEF).