Con esta iniciativa, que se desarrolla a instancia de la Confederación Sindical Internacional (CSI) a nivel mundial, se quiere reclamar a los Gobiernos empleos dignos y el pleno respeto de los derechos de los trabajadores y trabajadoras.

Además, el sindicato quiere evitar que caiga en el olvido la catástrofe ocurrida en el país asiático el pasado mes de abril y que se cobró la vida de 1.126 personas, y afirma que la desregularización de las condiciones laborales ha estado en la raíz de la catástrofe.

También denuncia que muchas de las multinacionales textiles cuentan entre sus premisas con compromisos de Responsabilidad Social que a la hora de hacer negocios y buscar el máximo beneficio se convierten en papel mojado.