Así lo dijo Azuaga en la que es su última junta general de accionistas al frente del banco, dado que presentó su renuncia el pasado mes de noviembre y le sustituirá José Sevilla, exconsejero delegado de Bankia, una vez que lo avale hoy la junta y posteriormente el consejo de administración. Sevilla será un presidente no ejecutivo mientras que las funciones ejecutivas recaen sobre Rubiales, que ya fue ratificado como consejero delegado en noviembre.

La junta voy hoy la ratificación de Sevilla como consejero independiente, para posteriormente ser nombrado por el consejo presidente, así como la renovación de María Luisa Arjonilla en calidad de consejera independiente y el nombramiento de Víctor Covián como dominical por la parte de Liberbank.

Azuaga afirmó que Unicaja abre “una nueva etapa” en la que “los próximos ejercicios serán determinantes para explotar nuestra fortaleza” y para “consolidar” su modelo de banca reforzándose en los territorios en los que lidera.

En este punto, Azuaga manifestó que la entidad cuenta con un consejero delegado con “una contrastada capacidad de liderazgo”, al que se suma el “compromiso constante” del consejo para crear valor. Añadió que confía en que “las aportaciones de José Sevilla resultarán muy valiosas y enriquecerán el consejo, dada su dilatada experiencia y exitosa trayectoria en el sector financiero”.

Puso en valor que, a día de hoy, el consejo está “altamente cualificado”, con una competencia y habilidades que “aseguran el mejor análisis y una fundamentada toma de decisiones estratégicas para el futuro de la entidad”.

Una vez votados favorablemente los puntos previstos, el consejo seguirá conformado por 15 miembros de los que el 40% son mujeres y un 60% son hombres.

“PROYECTO AUTÓNOMO E INDEPENDIENTE”

En su discurso, Azuaga destacó que durante su etapa como presidente “no ha sido sencillo” dados los conflictos internos. No obstante, aseveró que vislumbra “un futuro como proyecto empresarial autónomo e independiente, capaz de fijar su propia hoja de ruta”, ante la especulación de una posible fusión con el Banco Sabadell.

“No hemos cesado en la búsqueda de un tamaño adecuado para afrontar los retos y exigencias derivados de un contexto económico y financiero” que genera una “presión sin precedentes”, según afirmó. Así, sobre la fusión con Liberbank, destacó que ha dado “muchos beneficios” y una “amplia diversificada presencia”. También repasó que bajo su mandato el banco salió a Bolsa en 2017 y a finales de 2022 entró en el Ibex-35.

En la parte de inclusión financiera, recordó el convenio firmado con la ONCE para facilitar el acceso a los productos por parte de las personas con discapacidad, indicó que se han incorporado 150 agentes digitales para atender a los clientes y la ampliación de la atención en las zonas rurales.

Respecto al último ejercicio 2023, Azuaga destacó que se tomaron una serie de decisiones “clave” orientadas a “fortalecer” la posición del banco y que sea “más dinámico y eficiente”, que pueda “aumentar la rentabilidad”.

“Nos enfrentamos a un escenario y tiempos complejos que exigen prudencia en la gestión, pero al mismo tiempo la búsqueda de objetivos ambiciosos”, afirmó el presidente de Unicaja saliente. Para ello, apeló a “la predisposición al cambio y al compromiso e implicación”.

"GARANTIZAR LA ESTABILIDAD"

Por su parte, el consejero delegado trasladó a Azuaga que, “aun cuando naturalmente me hubiese gustado que continuase en el desempeño de su cargo”, dijo respetar su decisión de renuncia una vez concluida la fusión con Liberbank. Alabó de Azuaga su “gran y exitosa labor” en Unicaja y destacó que bajo el mismo, la entidad ha renovado su consejo en estructura y composición, lo que “fue clave en la transición vivida desde el modelo de cajas de ahorro a bancos”. Sabe que cuenta con nuestra admiración y gratitud”, expuso Rubiales.

“La entidad ha iniciado una nueva etapa, garantizando la estabilidad y la adecuada atención de nuestro día a día, centrándonos en nuestra responsabilidad y en crecer”, dijo Rubiales, alineándose con Azuaga.

Por otra parte, después de repasar las cifras obtenidas por la entidad en 2023, ejercicio en el que redujo su beneficio un 4% por saneamientos acometidos y tras pagar el impuesto extraordinario al sector, Rubiales se refirió al plan estratégico para el periodo 2022-2024.

Explicó que las prioridades estratégicas siguen centradas en potencial el crecimiento del negocio, una mayor especialización en actividad comercial y un aumento de la banca digital. Sobre este último aspecto, indicó que, en 2023, casi un 50% de los préstamos al consumo y el 27% de los fondos de inversión fueron contratados a través de canales digitales. El 30% de los nuevos clientes ya fueron captados por vía digital y tres de cada cuatro clientes activos son digitales.

Para 2024, repasó las previsiones de una mejora del margen de intereses, un mayor impacto en los gastos de explotación por la revisión salarial en convenio y otras medidas, mantener el coste del riesgo entre los 30-35 puntos básicos, una rentabilidad ROTE superior al 9%, una ratio de capital CET1 ‘fully loaded’ del 12,5% y una rentabilidad por dividendo en efectivo del entorno del 10%.

Rubiales declaró que la entidad encara el futuro “con ilusión y con confianza” y resaltó que está redoblando esfuerzos para mejorar.

Por último, en respuesta a las inquietudes de los sindicatos sobre la situación de la plantilla, valoró que el reciente preacuerdo para renovar el convenio de ahorro es "un buen acuerdo" e instó a "seguir mejorando y avanzando".