La ONG persigue mejorar en tres años el estado nutricional de la infancia que vive en las comunidades más vulnerables de 27 países del continente, a través de la promoción de intervenciones nutricionales para reducir el hambre entre las poblaciones más afectadas.

"La infancia se lleva la peor parte de la crisis alimentaria y sufre hambre y malnutrición graves, una situación que sigue poniendo en peligro su capacidad para sobrevivir, prosperar y alcanzar su pleno potencial", afirmó la directora regional de World Vision para África Oriental, Lillian Dodzo.

Los informes publicados por Naciones Unidas indican que en muchos países africanos la seguridad alimentaria no es un problema exclusivamente rural. Según el Programa Mundial de Alimentos de la ONU, se calcula que 68,1 millones de mujeres, hombres, niños y niñas de la población urbana "corrían el riesgo de sufrir inseguridad alimentaria aguda en el África subsahariana en 2020".

Además, más de mil millones de personas en todo el continente africano no pueden permitirse una dieta sana, y aproximadamente el 30% de la infancia sufre retraso en el crecimiento debido a la malnutrición, señaló World Vision.

La campaña forma parte de una iniciativa mundial de la entidad relacionada con el Objetivo de Desarrollo Sostenible, Hambre Cero. También incluye un impulso para mejorar los sistemas de recopilación de datos a nivel nacional y mundial, de modo que los niños y niñas puedan recibir apoyo y que "sus voces sean escuchadas" a la hora de dar forma a políticas y resultados clave.