El secretario general de la Conferencia Episcopal Española, Francisco César García Magán, compareció en rueda de prensa en la sede de los obispos españoles en Madrid para celebrar el nombramiento del nuevo pontífice y sacar a relucir que ahora más que nunca hace falta alguien como él para aplicar “la doctrina social de la Iglesia”.

García Magán subrayó el “perfil poliédrico” y “muy rico” de León XIV por tener una “formación sólida en Teología” y ser doctor en Derecho Canónico, pero a la vez por haber sido enviado a trabajar a Perú “como misionero” desde joven y haber desarrollado allí una extensa carrera en cargos eclesiásticos.

“Une lo institucional y lo curial, lo jurídico con lo pastoral. Ha sido misionero y obispo diocesano y ello envuelto en ese ámbito de ser un hijo espiritual de San Agustín, uno de los grandes padres de la iglesia latina. Ha bebido en esa fuente teológica”, declaró ante los periodistas.

García Magán ensalzó también que en sus primeras palabras ha trazado un “puente” con el papa Francisco, puesto que la víspera de su muerte se despidió de la gente en la Plaza de San Pedro del Vaticano deseando la paz al mundo en la celebración del Domingo de Resurrección y León XIV ha pronunciado en su primera frase el saludo con el que Jesucristo se apareció ante los apóstoles: “La paz sea con todos vosotros”.