Cultura

El 1,6% de la población en el sureste europeo habla español

- Casi el 93% de los hispanohablantes se concentra en Grecia, Serbia, Croacia y Eslovenia

Madrid
SERVIMEDIA

Un total de 539.655 personas oriundas de los países del sureste europeo -de las que 507.018 residen en ellos-, habla español, un guarismo que representa al 1,6% de la población de una región habitada por 32,9 millones de personas.

Esta es una de las conclusiones de ‘Demolingüística del español en el sureste europeo’, el sexto volumen de la colección ‘El español en Europa’, una publicación impulsada por el Instituto Cervantes en colaboración con la Universidad de Heidelberg (Alemania) y la Universidad de Zúrich (Suiza).

Este trabajo analiza la situación del español en Albania, Bosnia y Herzegovina, Chipre, Croacia, Eslovenia, Grecia, Macedonia del Norte, Montenegro y Serbia.

Este texto fue presentado este miércoles en la sede del Cervantes por la secretaria de la secretaria general de la institución, Carmen Noguero, en un acto que contó con un coloquio en el que participaron Marko Kapovic y Vita Veselko, coautores del estudio; Iñaki Abad, director del Instituto Cervantes de Belgrado; Héctor Álvarez, de la Universidad de Heidelberg; y Francisco Moreno Fernández, director del Observatorio Global del Español.

‘Demolingüística del español en el sureste europeo’ pone de manifiesto que un total de 539.655 personas nativas de los países del sureste europeo -de las que 507.018 residen en ellos-, habla español, lo que representa al 1,6% de la población de una región habitada por 32,9 millones de personas.

Los autores del estudio pusieron de manifiesto que, comparadas con otras regiones del centro y del oeste europeo, “se trata de cifras demolingüísticas más modestas que, no obstante, revelan la importante progresión del español en territorios más periféricos, tanto territorial como políticamente, respecto de los países hispanohablantes”.

El documento incluye un apartado dedicado a la educación en el que se evidencia “la baja institucionalización del español como lengua extranjera”, fruto de que el idioma “no forma parte de las asignaturas de la enseñanza preuniversitaria o sólo tiene una baja elegibilidad, por lo que el número de estudiantes tiende a ser reducido”.

El “ejemplo sintomático” de la falta de institucionalización del español es Grecia, donde apenas el 20% de los estudiantes del idioma de Cervantes se encuentra en la educación reglada.

El trabajo cifra en más de 58.000 los estudiantes que estudian español. De ellos, un 53% lo cursan en la enseñanza no reglada y un 47% se reparte entre la educación primaria, la secundaria y la universitaria.

En total, hay más de 6.500 alumnos estudiando español en las universidades del sureste europeo, de los que más de 2.000 están matriculados en estudios hispánicos en las once universidades de la región que los ofertan.

En el mejor de los casos, Eslovenia, la filología española ocupa el tercer lugar en número de estudiantes, después de la inglesa y la alemana, aunque “a gran distancia en número de alumnos”.

Por otra parte, ‘Demolingüística del español en el sureste europeo’ ofrece un repaso a la migración en esta zona, poniéndose de manifiesto que ni España ni los países hispanohablantes de Iberoamérica constituyen un “destino prioritario” de la emigración, representando un 0,4% del total.

La población de esta zona de Europa que vive en países hispanohablantes asciende a unas 32.600 personas. De ellas, el 60% reside en España.

Por el contrario, la inmigración hispanohablante en la región es “muy reducida”, con casi 9.500 personas que representan apenas un 0,8% de la inmigración procedente del mundo hispánico. El perfil de estas personas es el de una mujer joven, afectada mayoritariamente por reunificaciones familiares.

DISTRIBUCIÓN “ASIMÉTRICA”

Por último, cabe destacar que la distribución de la población que habla español en el sureste de Europa es “asimétrica”, como lo atestigua que casi el 93% de ella vive en cuatro países: Grecia, Serbia, Croacia y Eslovenia.

Los autores del trabajo recuerdan que esta región tiene “un importante pasado sefardí, especialmente en Grecia, aunque en la actualidad y desde el punto de vista demográfico se trate de una comunidad muy pequeña y en algunos países prácticamente desaparecida debido al Holocausto y las migraciones hacia Israel”.

(SERVIMEDIA)
07 Mayo 2025
MST/clc