En el documento, que todavía no ha sido hecho público de manera oficial, los firmantes solicitan además una mayor intensidad democrática interna en el PSOE.

Los firmantes del escrito rechazan la acumulación de cargos públicos en una misma persona y abogan por el reparto del poder, tanto en el partido como en las instituciones.

En su manifiesto, los socialistas cordobeses exigen el voto individual en los procesos congresuales para dar ayor dinamismo a la vida interna del partido.

Ese centenar de cargos socialistas reivindica una profunda renovación interna para que el partido se abra a la sociedad y sintonice con sus demandas.

El documento, conocido como el de Puente Palmeras, ha sido suscrito, entre otros cargos, por seis Delegados provinciales de la Junta de Andalucía.

También firmó el escrito el congresista, Pedro Moya, y los alcaldes de las localidades cordobesas de Baena, Lucena y Pozoblanco.

El manifiesto polítco fue fue suscrito, sin embargo, por el que fuera consejero del Gobierno autónomo andaluz, Manuel Gracia, considerado como uno de los máximos exponentes de los renovadores del socialismo en la provincia de Córdoba.