Los tratantes de mujeres ganan 50.000 euros al año con cada víctima

- Expertos acusan a la política migratoria de favorecer la trata

MADRID
SERVIMEDIA

Las redes de trata de mujeres ingresan una media de 50.000 euros al año por cada víctima a la que explotan sexualmente, según han revelado investigadores españoles que, junto a otros académicos europeos, elevarán el próximo mes un informe a la Comisión Europea sobre los flujos económicos y financieros de esta práctica ilegal.

Hasta ahora se conocían las cifras ‘macro’ sobre el volumen de negocio de la trata sexual de mujeres, que mueve en España alrededor de cinco millones de euros al día. Sin embargo, un informe europeo en el que colabora la investigadora Carmen Meneses, profesora de la Universidad Pontificia de Comillas, revela la parte ‘micro’ de la esclavitud moderna.

La respuesta a cuánto vale una víctima –al margen de lo no cuantitativo- había sido una incógnita entre las cifras oficiales. Lo que está claro es que a un tratante “le sale muy barata” una mujer explotada, explicó esta investigadora en declaraciones a Servimedia, que ha participado hoy en la presentación del 'Informe España 2017', elaborado por la Cátedra José María Martín Patino de la Universidad Pontificia de Comillas y la Fundación Ramón Areces.

Si una víctima de trata procede de Europa del este costaría a sus explotadores, según sus datos, alrededor de 200 euros por el transporte, mientras que la víctima contraería una deuda de 6.000 euros. Si viene de África Subsahariana –gran parte de las víctimas proceden de Nigeria- las redes invierten unos 5.000 euros y la deuda asciende a 50.000.

En el año 2016 las autoridades españolas identificaron a 365 mujeres víctimas de trata, de las cuales 212 eran nigerianas. Las redes que las captan en el origen las mueven por diferentes países europeos, ya que una vez han entrado en territorio Schengen la movilidad es sencilla y transitan en función de los beneficios que puedan aportar a la red.

En este periplo, España actúa como una puerta de entrada a Europa, después de atravesar –en el caso de las mujeres nigerianas- Níger, Argelia y Marruecos para cruzar el Estrecho entre Tánger y Tarifa, generalmente en patera.

De media, el coste de introducir a una víctima de trata en un país europeo sería de unos 2.000 euros, según Meneses. Sin embargo, los beneficios son cuantiosos y rondan los 50.000 al año, lo que convierte esta práctica ilegal en “un negocio muy lucrativo” que convierte a las mujeres en “esclavas”.

SOMETIMIENTO

Uno de los mayores problemas es que ellas mismas tan siquiera asumen que son víctimas y no se identifican como tales, ya que “la única forma que tienen de entrar en Europa son las redes” y, por tanto, “allí el bueno es el tratante”, que está facilitando a la víctima su entrada a territorio europeo.

De hecho, Meneses –que se ha entrevistado en los últimos años tanto con víctimas de trata como con tratantes, prostitutas y regentes de clubes de alterne- acusa directamente a la política migratoria de que las mujeres recurran a la trata para llegar a Europa.

“Los requisitos para entrar no los pueden cumplir; no van a tener un pasaporte en regla, una visa, una carta de invitación, de trabajo o dinero”, señaló. Por eso son las redes quienes aportan el mínimo de 580 euros (o 58 euros por día de estancia) de los que deben disponer para pasar el control de fronteras, así como el resto de organización para su llegada y que incluya en muchas ocasiones alquiler y otros servicios.

PONER CIFRAS

A juicio de Meneses, era una necesidad “poner cifras” y “delimitar” la magnitud de la trata y explotación sexual de las mujeres, contabilizar “con rigor” su situación para ponerle coto. Así se facilita el comprender cómo una mujer no denuncia por miedo, ya que viven bajo amenaza y “no se duda en dar una paliza a la víctima”.

El director de la Cátedra José María Martín Patino de la Universidad de Comillas, Agustín Blanco, aseguró por su parte que la trata es un tema “invisibilizado” y que, por esa razón, han decidido incluirlo este año en su 'Informe España', que aborda otras cuestiones como la dependencia, las pensiones o la política en “tiempos de incertidumbre”.

(SERVIMEDIA)
11 Dic 2017
GIC/caa