Según informó el Ministerio de Asuntos Exteriores, el Ejecutivo mostró su apoyo a la “centralidad” de la ONU y a los esfuerzos del enviado especial del secretario general de Naciones Unidas, Staffan de Mistura, en el marco de lo dispuesto en la Resolución 2254 del Consejo de Seguridad de la ONU.

El Gobierno instó a la responsabilidad de las partes para que “se impliquen urgentemente y de buena fe” en el proceso negociador y acaben con la “grave situación humanitaria”.

De Mistura admitió ayer que en la octava ronda del diálogo entre el Gobierno y la oposición siria no se consiguieron resultados palpables debido a las diferencias que ambas partes mantienen acerca del futuro del presidente de Siria, Bachar al Asad.