La Plataforma contra la Islamofobia detectó 546 incidentes en 2017

- El 1-O eclipsó a los ataques a musulmanes en las redes sociales tras los atentados de Barcelona y Cambrils

MADRID
SERVIMEDIA

En 2017 se registraron en España un total de 546 incidentes homófobos, de los que 160 fueron 'offline' y 386 en medios e Internet. Casi la mitad (255) fueron contra el islam y los musulmanes en general y uno de cada cinco (113) a mujeres musulmanas, el colectivo más perjudicado por esta lacra. Incluso, una mujer embarazada fue víctima de un ataque.

Son algunos de los datos del 'Informe sobre la Islamofobia en España 2017', presentado este viernes por la Plataforma contra la Islamofobia en la Casa Árabe de Madrid, que nació en 2011 y que está compuesta por Movimiento contra la Intolerancia, la Junta Islámica y el Centro Cultural Islámico de Valencia.

Entre las conclusiones más destacadas de este estudio sobresalen el aumento del ciberodio hasta convertir las redes e Internet en "un infierno" para los musulmanes; y el notable repunte de estos casos tras los atentados de Barcelona y Cambrils, aunque el tema de la independencia catalana "ha desviado mucho la atención" y Cataluña ya ha destacado anteriormente en poner trabas a la comunidad musulmana, según los promotores del informe.

Durante la presentación, la portavoz de la plataforma, Isabel Romero, denunció que la islamofobia "tiene cocina y está bien financiada por organizaciones nacionales e internacionales". Estas organizaciones, denunció, se valen del “gran desconocimiento real sobre los musulmanes y el Islam” y lo fácil que es construir desinformación en ese clima.

Concretó que, tras el 1 de octubre, la ‘catalanofobia’ y la ‘españofobia’ tomaron el relevo a la islamofobia porque también estaban orquestados en las redes sociales a pesar de la cercanía de los atentados en Cataluña.

CALDO DE CULTIVO

En la misma línea se pronunció la investigadora Bárbara Ruiz, una de las 20 personas que han trabajado voluntariamente en el estudio, pues pidió expresamente que se emprendan medidas concretas en Cataluña, donde también los tres informes anteriores han denunciado un mayor caldo de cultivo de la islamofobia. De hecho, en esa comunidad autónoma suele haber caceroladas, pintadas y cabezas de cerdo, cuando los musulmanes abren comercios o mezquitas y éstas suelen ubicarse en polígonos industriales, relató.

Precisamente, Esteban Ibarra, presidente del Movimiento contra la Intolerancia, pidió a Cataluña “que se lo mire un poco” porque en los cuatro informes “los incidentes han sido muy destacados en esta comunidad autónoma”, dijo. De hecho, el 31% de los casos ‘offline’ (160 en total) documentados en el informe (51) fueron en Cataluña.

EXTRANJERIZACIÓN

Ruiz denunció también la “extranjerización” que se atribuye a los musulmanes españoles, y que en su caso propio le han llegado a preguntar su origen o el de sus padres. “El Islam lleva cientos de años en España” y es “una opción perfectamente lícita para los españoles”, declaró.

Tema aparte es el ciberodio, cuya proliferación ha obligado a la plataforma a cambiar la metodología de recogida de datos para el informe presentado este viernes. Aurora Ali se ha especializado en este apartado del estudio y denunció que plataformas como Facebook deben hacer más para frenar los "ataques coordinados" a los musulmanes en Internet.

También advirtió que "el vacío legislativo" de las redes y "el oportunismo" de algunos, incluidos políticos, llevan al “'shock' emocional social” cuando el Daesh revindica un atentado, especialmente si tiene lugar en Europa. "La historia nos ha demostrado una y otra vez que la propaganda precede a la acción", lamentó.

LEGISLACIÓN

Ibarra también subrayó que “tenemos legislación suficiente” para combatir la islamofobia en España, y enumeró una serie de medidas que pasan desde la actuación de oficio de las fiscalías, crear una asignatura de “Educación para la tolerancia y el respeto”, impulsar “una Ley orgánica integral contra los delitos de odio” de manera “urgente”, otra “ley general contra la discriminación” y que las plataformas de internet sean más eficaces. “Lo único que hacen es asomarse al infierno del ciberodio. Si se crea un clima de intolerancia eso va a confluir en hechos violentos”, pronosticó.

No todo fue negativo en la presentación del documento, pues los portavoces destacaron también que, tras los atentados de Barcelona y Cambrils, la islamofobia convivió con una ola de solidaridad que, por ejemplo, convirtió en tendencia en las redes sociales a etiquetas de apoyo al colectivo como “#yoteacompaño” y “#untaxistamarroqui”.

(SERVIMEDIA)
02 Mar 2018
AHP/gja