Lo dijo en los pasillos del Congreso de los Diputados después de que Rivera retirara su apoyo al Gobierno en ese ámbito por entender que ha pactado con los nacionalistas una aplicación laxa de ese precepto para garantizar que haya un gobierno en la Generalitat.

Recordó que ese artículo se ha aplicado por primera vez en la historia de España y se ha hecho "con un consenso importante" y después de conversaciones con los grupos parlamentarios, a la vista de que una comunidad autónoma "se había saltado completamente la legalidad y el respeto a la Constitución y a los derechos del conjunto de los ciudadanos".

Igualmente, añadió, cualquier modificación en esa situación "tiene que nacer de un consenso muy amplio" y, además, dado que es una exigencia constitucional, de un análisis de las circunstancias objetivas y en el momento presente.

Todo ello, concluyó la vicepresidenta, requiere "trabajar con lealtad" y abordar el asunto "con muchísima seriedad". Por ese motivo el Gobierno ha suministrado al PSOE y a Ciudadanos "máxima información" y lo seguirá haciendo, pero siempre sobre la premisa de que es "un tema serio".