Salud

La dificultad para tragar aumenta la mortalidad a los tres meses de sufrir un ictus

MADRID
SERVIMEDIA

La disfagia orofaríngea o dificultad para tragar aumenta la probabilidad de mortalidad a los tres meses de sufrir un ictus, según un estudio coordinado por un equipo multidisciplinar del Consorci Sanitari del Maresme en colaboración con el Centro de Investigación Biomédica en Red en su área temática de Enfermedades Hepáticas y Digestivas (Ciberehd).

Según informaron este viernes ambos centros de investigación, estos resultados demostraron que las personas que han padecido un inctus se recuperan antes y mejor gracias al tratamiento precoz de la disfagia orofaríngea.

Esta dificultad para tragar bien tiene un gran impacto en el pronóstico de los pacientes que han tenido un ictus y, pese a ello, está infradiagnosticada, según destacaron los investigadores en este estudio publicado en la revista ‘Neurogastroenterology & Motility’.

El estudio incluyó 395 pacientes que habían ingresado de forma consecutiva en el Hospital de Mataró, en Barcelona, por un ictus, de los cuales se hizo un seguimiento durante el ingreso y a los tres meses de alta. Durante este tiempo se analizó la relación entre ictus y disfagia.

Los autores de la investigación concluyeron que todas las complicaciones se pueden evitar con la detección sistemática y precoz de la disfagia orofaríngea y su intervención inmediata. Esto ya se practica en el Hospital de Mataró, que trabaja de forma multidisciplinar en dos líneas de actuación en pacientes con disfagia post-ictus con un porcentaje alto de éxito: por un lado, hace tratamientos de neurorehabilitación, y por otro, hace estimulación cerebral y faríngea.

(SERVIMEDIA)
18 Mayo 2018
ABG/caa