El informe también señala que casi un tercio de los encuestados no es capaz de controlar el tiempo que pasan pendientes del móvil. Los coordinadores del estudio destacaron que las mujeres puntúan más alto en todas las escalas, menos en videojuegos. También indicaron que no hay apenas diferencias entre el nivel de desarrollo del distrito en el que viven ni si se tiene en cuenta el tipo de financiación de los centros educativos.

El estudio se basa en encuestas que se realizaron a 2.341 alumnos de 31 centros educativos públicos, concertados y privados. La recogida de datos se efectuó entre diciembre de 2016 y marzo de 2017 a alumnos de cuarto curso de Educación Secundaria Obligatoria (ESO), lo que supone un total de 104 aulas. Más de un 90% de los encuestados tenían entre 15 y 16 años.

La encuesta preguntaba cuestiones relacionadas con Internet, el móvil, videojuegos, mensajería instantánea y redes sociales. El objetivo era conocer la relación entre el uso y abuso que los adolescentes hacen de las nuevas tecnologías y cómo les afecta, tanto desde la perspectiva biológica, psicológica como social, su uso abusivo.

Los autores destacan los datos referidos a las conductas asociadas. Casi el 60% de los encuestados reconoce pasar las horas con el teléfono móvil sin que se den cuenta. El mismo porcentaje que asegura pasar demasiado tiempo al móvil, hecho que le repercute en sus estudios. Por otra parte, casi el 10% de los adolescentes reconocía haber utilizado web de apuestas deportivas. Dentro de este porcentaje, casi el 13% son varones y el 0,7%, mujeres.

Whatsapp y Youtube se sitúan entre las aplicaciones más utilizadas por los adolescentes, seguidas de Instagram, Snapchat y Spotify. En la cola de la lista, se posiciona la plataforma ‘Wattpad’ que permite escribir, leer y compartir historias con otras personas. Las mujeres encuestadas son quienes más uso hacen de esta aplicación, con un 21% frente al 2%.

Los encargados de presentar el informe ‘Uso y abuso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación por adolescentes’ fueron Susana Méndez Gago, coordinadora de la investigación, y Eduardo J.Pedrero-Pérez, director de la parte más técnica del estudio. Una de las conclusiones que los ponentes destacaron fue que la inmadurez en la corteza prefrontal del cerebro se relaciona de manera casi lineal con el uso problemático de las TIC.

Tras la presentación del informe se llevó a cabo un pequeño coloquio entre los expertos que participaron en el estudio, entre los que había directores de colegios, representantes de empresas y educadores sociales.