Según informó este miércoles Ciudadanos, la regulación del juego en España posee una fragmentación territorial que genera una variabilidad normativa que ha supuesto que algunas comunidades estén altamente avanzadas en la regulación de la ordenación del juego y la prevención de conductas adictivas, mientras otras parecen haberse quedado descolgadas.

Además, en su PNL destaca que el estudio y análisis de los factores de riesgo del trastorno de juego en población clínica española del año 2017, coordinado por la Dirección General de Ordenación del Juego, proporciona información de los perfiles psico-sociales más afectados por los trastornos en la actividad de juego.

Así, la radiografía de los jugadores problemáticos en España es el de un hombre soltero, activo laboralmente, que no dispone de ayudas sociales, que presenta un inicio precoz de la conducta de juego y padece problemas relacionados con la salud. El informe señala que la media de edad de inicio en el juego en España es a los 21 años, habiéndose iniciado en el juego el 36% de los encuestados antes de los 18 años, según este estudio.

En la proposición no de ley también se señala que la Asociación Española de Empresarios de Salones de Juego y Recreativos (Anesar), en su memoria 2018, afirma que el juego es un negocio rentable que crece anualmente en España.

Según los datos que arroja su última memoria, el número de casas de apuestas se han multiplicado en todas las comunidades autónomas. De los 2.441 salones que existían en todo el país en el año 2014, se han alcanzado 3.132 en 2017. Por ejemplo, en Madrid, con fecha de principios de mayo había en la región 385 salones dedicados al juego y a las apuestas deportivas frente a los 328 de 2016.

Por todo ello, Ciudadanos insta al Gobierno a revisar y actualizar las normativas autonómicas en materia de juego, drogadicciones y otros trastornos adictivos, así como la necesidad de evitar que este tipo de negocios se sitúen en las proximidades de centros escolares, centros juveniles, bibliotecas o establecimientos públicos frecuentados por menores de edad.