Según la patronal eólica, se trata de “una medida oportuna con efectos directos sobre el precio de la electricidad y que aliviará el incremento de la factura que se ha producido en los últimos meses”.

No obstante, advierte de que esta suspensión del impuesto es una medida paliativa por su carácter urgente, que deberá ir acompañada de una reforma del mercado eléctrico en los próximos meses.

“La futura reforma es necesaria y debe ser fruto de un consenso social y político, que garantice su estabilidad”, señaló Virgilio.