Lo hizo en su intercambio dialéctico en la sesión de control al Gobierno del Congreso, tras preguntar a la ministra si “va a ceder el Gobierno a las presiones de sus socios y ordenar a la Fiscalía que cambie su postura sobre el 1 de octubre?. En plena polémica por las grabaciones del excomisario José Villarejo de una comida de hace 10 años en la que participó Delgado, acusó a esta de haber “rectificado en cinco ocasiones” sobre su relación con el expolicía, lo que le ha convertido en “paradigma de la mentira”.

“Usted es un zombi. Le hubiera ido mucho mejor si en vez de juntarse con exjueces prevaricadores (en referencia a Baltasar Garzón, también presente en la comida) hubiera defendido al juez Llarena”, le espetó, en alusión a su comentario inicial de que su defensa frente a una querella del abogado del expresidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont, era cosa personal del magistrado de la Audiencia Nacional. “Usted es una rémora, no una víctima. Es culpable. La opinión pública ya le ha condenado. ¡Váyase!”, le dijo.

Por lo demás, Delgado se aferró a la independencia de los jueces tanto para rechazar la pregunta de Hernando como una posterior de la portavoz de En Comú Podem, Lucía Martín, sobre qué va a hacer el Gobierno para “esclarecer y reparar la represión” policial el 1-O.

“Este Gobierno nunca jamás ordena a la Fiscalía, respeta su autonomía. Lo haría su Gobierno”, contestó al diputado del PP, quien repuso que “no hace falta que le dé instrucciones”, porque ya nombró una fiscal general “dócil” y ésta “ya sabe lo que hay que hacer”.

A García le respondió inicialmente que “no compete a este Ministerio hacer valoración alguna”, y lo repitió en su segundo turno, tras mencionar la portavoz de En Comú Podem los correos de jueces vilipendiando a los líderes independentistas, porque esto “compete en su caso al CGPJ” y “el Ministerio no se puede interferir ni inmiscuir en actuaciones judiciales”, porque cree en “la independencia de los jueces”.