Así lo informó este sábado el Consejo General de Colegios Oficiales de Dietistas Nutricionistas, organizador del encuentro, y que, en nota de prensa, subrayó que, aunque en España hay más de 4.000 dietistas-nutricionistas colegiados, el Sistema Nacional de Salud no cuenta “suficientemente” con estos profesionales a pesar del incremento de dietistas-nutricionistas titulados, el interés "creciente" en la sociedad por la alimentación y la "necesidad, cada vez mayor, de abordar la salud desde el punto de vista nutricional".

A este respecto, el coordinador del Grupo de Especialización en Salud Pública de la Federación Europea de Asociaciones de Dietistas, Manuel Moñino, señaló que España cuenta con profesionales “altamente cualificados” en estas áreas y, además, criticó que, en el Real Decreto 1277/ 2003 por el que se establecen las bases generales sobre autorización de centros, servicios y establecimientos sanitarios, las unidades de dietética y nutrición no estén asignadas al dietista-nutricionista.

EQUIPOS INTERDISCIPLINARES

Por su parte, la presidenta del Consejo General de Colegios Oficiales de Dietistas Nutricionistas, Alma Palau, incidió en que el tratamiento dietético-nutricional dispensado por equipos interdisciplinares que incluyen al dietista-nutricionista tiene un “gran impacto positivo” en la recuperación, en la reducción del riesgo de recaída de los pacientes y de los ingresos hospitalarios, “con el consiguiente ahorro del gasto sanitario”.

Unos resultados positivos que, a su entender, resultan “evidentes” en el abordaje de las enfermedades de mayor prevalencia “y que mayor impacto tienen en el gasto sanitario y en coste socio-laboral” como el cáncer, las enfermedades cardiovasculares, la obesidad o diabetes. Por todo ello, según Palau, la incorporación de la figura del dietista-nutricionista al Sistema Nacional de Salud es una “inversión coste-eficiente”.

En la misma línea, Giuseppe Russolillo, presidente de la Academia Española de Nutrición y Dietética, añadió que el riesgo de malnutrición hospitalaria es “otro factor que podría verse disminuido” con la incorporación de un dietista-nutricionista por cada 100 camas, una propuesta que ya fue presentada ante el Senado, en una ponencia de estudio sobre las profesiones sanitarias.