Éste es uno de los resultados de la campaña puesta en marcha por la Dirección General de Tráfico (DGT) del 1 al 7 de octubre de incremento de la vigilancia del uso del cinturón de seguridad y de los sistemas de retención infantil, dentro del calendario de campañas de Tispol (siglas en inglés de Red Europea de Policías de Tráfico).

Tráfico señaló este lunes que “preocupa sensiblemente” que los agentes hayan detectado en una semana a 189 menores de edad viajando en un vehículo sin utilizar ningún tipo de sistema de retención, de los cuales 52 ocupaban asientos delanteros y 137 iban en asientos traseros.

La DGT indicó que uno de los objetivos previstos en la Estrategia de Seguridad vial aprobada por el Gobierno para la década actual (2011-2020) es lograr que ningún niño pierda la vida por no ir sentado en una silla adecuada a su peso y talla.

Los agentes controlaron 330.996 vehículos en la semana de campaña y detectaron 3.183 infracciones de conductores o pasajeros que no llevaban puesto el reglamentario sistema de retención. A estos datos hay que añadir los vehículos controlados en numerosos ayuntamientos por sus policías locales.

La gran mayoría de las personas que no hacían uso de los sistemas de retención circulaba por carreteras secundarias (es decir, de un carril por sentido). En concreto, el 76% de las denuncias (2.432) fueron interpuestas en este tipo de vías.

“Este tipo de campañas hay que seguir realizándolas porque la realidad de los accidentes nos muestra que un porcentaje alto de los fallecidos en accidente de tráfico no hacía uso del cinturón de seguridad. Este fin de semana, de los seis fallecidos que viajaban en turismo, cuatro de ellos no hacían uso del mismo”, apuntó en un comunicado el director general de Tráfico, Pere Navarro.

UN SEGURO DE VIDA

Según la DGT, el uso del cinturón de seguridad en los vehículos reduce a la mitad el riesgo de muerte en caso de accidente, por lo que es “un elemento básico de la seguridad vial, un seguro de vida”, y “su uso es obligatorio para todos los ocupantes del vehículo y en todo tipo de vías”.

Los menores de edad de estatura igual o inferior a 1,35 metros deben viajar con el sistema de retención infantil adecuado a su talla y peso, como la norma exige, e ir sentados obligatoriamente en los asientos traseros de los vehículos, excepto cuando el vehículo no disponga de asientos traseros, todos los asientos traseros estén ya ocupados por otros menores de las mismas características o no sea posible instalar sillitas en las plazas traseras. En esos tres casos, los menores podrán ocupar el asiento del copiloto siempre que utilice el sistema de retención homologado a su tamaño.