Gil Lázaro afirmó en una nota de prensa que “Rubalcaba miente, una vez más, para negar información al Congreso sobre el caso Faisán”, argumentando que dicho informe se realizó en el ejercicio de funciones de policía judicial y que se integra en una investigación judicial.

Según el PP, “los informes elaborados por la Guardia Civil sobre el chivatazo jamás fueron remitidos a la autoridad judicial y, por tanto, constan en los archivos de la Dirección General sin sometimiento a ninguna cautela ni reserva de orden jurisdiccional, lo que obliga a su puesta a disposición de la Cámara”.

“En un primer momento”, continuó Gil Lázaro, “Grande-Marlaska solicitó al Cuerpo Nacional de Policía y a la Guardia Civil que iniciaran investigaciones separadas sobre el chivatazo. Antes de formalizar definitivamente esa petición, el juez Garzón, al recuperar el caso, apartó de éste a la Guardia Civil y tampoco reclamó a ésta la información que hubiera podido reunir hasta entonces”.

“Por tanto, todas las pesquisas que realizó la Guardia Civil no forman parte del soporte documental de las actuaciones judiciales en curso, ni existe tampoco ningún mandato del actual instructor para que la Guardia Civil realice informe alguno al respecto”, argumentó.

“La Guardia Civil ni ha sido ni es policía judicial en el caso Faisán y escudarse en este carácter para no entregar las informaciones que ésta pudiera tener es, sencillamente, mentir", concluyó Gil Lázaro, comparando la "argumentación falaz" de Interior a la "estrategia seguida inicialmente por los gobiernos de (Felipe) González, de los que era portavoz Rubalcaba, para oponerse a atender los requerimientos del Congreso cuando en su momento comenzaron a conocerse los primeros capítulos de la guerra sucia y el expolio de los fondos reservados”.