Banca

El Sabadell modulará la estrategia del TSB al comportamiento de Reino Unido

MADRID
SERVIMEDIA

El consejero delegado del Sabadell, Jaime Guardiola, afirmó hoy que impulsarán "más o menos" la estrategia de la filial británica TSB en función del "comportamiento" de Reino Unido, donde admitió que hoy es imposible hacer pronósticos sobre el desenlace del 'Brexit'.

El banquero admitió durante el '14 Encuentro del Sector Bancario' del IESE y EY que "la preocupación más grande es cuánto se va a ver afectada la economía británica" y de ahí la existencia de un plan de contigencia sobre el nivel de desarrollo de la filal.

A fecha actual subrayó que la presión para TSB es que muchos rivales se están volcando en el negocio hipotecario, donde es especialista, provocando con la mayor competencia una reducción de los márgenes o spreads que presiona a la cuenta, pero reivindicó la calidad de su cartera.

Según detalló, los riesgos está muy contenidos gracias a que el importe medio concedido ronda el 50% del valor de tasación y su negocio "no está mucho en Londres", sino en la Inglaterra "más profunda" y alejada de los potenciales efectos de la ruptura con el euro.

Guardiola recordó que la apuesta de TSB era además de crecimiento en el negocio de empresas donde buscaba reforzar la posición optando a hacerse con el negocio de financiación de pymes que tiene en venta Royal Bank of Scotland (RBS).

PRESIÓN AL CRÉDITO POR LA REGULACIÓN

Durante su intervención, Guardiola abordó con preocupación los crecientes requisitos regulatorios para la banca y avisó de los "efectos perversos" que tanta exigencia de capital puede tener para el crédito y la rentabilidad de la banca.

"A lo mejor esa no va a ser la fuente de problemas en el futuro", refirió, aunque dé confortabilidad al regulador porque tiene controlada la banca con altos colchones de solvencia.

Si bien reconoció observar cierta "pausa" en el alud de normas para elevar capital, liquidez, etc, y que el regulador ha pautado una entrada progresiva, indicó que los mercados pierden la paciencia y se mantiene la presición porque exijen el cumplimiento casi instantáneo.

De forma ilustrativa detalló que mientras que el capital de máxima calidad CET1 exigido a la banca sobre los activos en riesgos se ha incrementado desde un 6% al 10-10,5% en los últimos años, el crédito disminuye ya que la obligación de acopiar más o menos hucha depende del riesgo del negocio y crédito que den.

Al respecto, refirió que en los últimos 17 años la financiación bancaria apenas ha crecido en 5.000 millones de euros en la zona euro, siendo otros agentes, como las compañías aseguradoras, los que han tomado el relevo como financiadores. "A base de apretar tanto, el crédito se ha ido de los bancos", afirmó.

El segundo efecto es que esos crecientes requerimientos "no contribuyen mucho" a que la banca pueda mejorar la rentabilidad como exigen los mercados y se necesita para su supervivencia, indicó.

La banca española ha logrado enderezar la rentabilidad y elevarla al 8,9%, por encima incluso del 7,2% medio de la banca europea, aunque continúa por debajo de lo que le cuesta acopiar precisamente el capital regulatorio en los mercados.

Guardiola dijo que el riesgo de una banca no rentable es que se produzca "un estrangulamiento de la economía" si no logra proporcionar el crédito que necesitan las familias y las empresas.

Una opción para mejorar las cuentas es ganar eficiencia. Guardiola admitió, al respecto, que "hay margen para que haya mayor concentración" en España, pero muy reducido tras la "brutal" concentración ya sufrida, y opina que en Europa no se dan las condiciones para fusiones todavía.

(SERVIMEDIA)
12 Dic 2018
ECR/caa