"Es algo que, en principio, debería producir beneficios para el consumidor porque esa presión en las condiciones económicas se termina trasladando al resto del mercado", admite en entrevista con Servimedia.

La banca ha convertido el seguro en su enésimo campo de batalla comercial para recomponer la rentabilidad y encontrar nuevos caladeros de actividad e ingresos frente a un negocio crediticio todavía menguante en términos de volumen y de escaso margen con los tipos de interés a ras de suelo.

La mayoría de bancos han establecido, incluso, alianzas con aseguradoras o los buscan para rodar con mayor velocidad y mejores prestaciones la nueva estrategia.

A pesar de la rivalidad creciente, Pilar González de Frutos ve en estos momentos positiva la competencia: "Siempre que hay nuevos operadores, efectivamente, se crean tensiones pero, hasta el momento, yo creo que la aportación de la banca en el sector asegurador ha sido hacer crecer la tarta".

En este sentido asegura que "hay mucha operación que hoy se abre en entidades financieras y que después se revierte en otros canales que, probablemente, no se iniciaría si no fuera directamente en ese canal. Cuando se contrata un seguro vinculado a una operación financiera, o lo haces en ese momento o es dudodo que la operación se llegase a hacer".

Una de las ocasiones donde mayor número de pólizas suele contratarse es con la firma del préstamo para adquirir una vivienda y con la entrada en vigor de la nueva ley hipotecaria se prohibirá al banco presentar la oferta en pack, exigiéndole que detalle el coste de cada uno de los productos incluídos para que el cliente pueda hacer cálculos y decidir si le compensa la oferta o le sale mejor contratar solo el préstamo aunque sea a un tipo de interés superior.

SEGUROS QUE EVITAN EMBARGOS

Ante el riesgo de que el usuario decida prescindir de capas de seguros en ese momento, González de Frutos reivindica la necesidad de hacer pedagogía y explicar el valor real de la protección: "No es solo una cuestión de echarle capitas para que el negocio salga mejor, es que durante los años de la crisis, y tenemos estadísticas, muchos lanzamientos dejaban de producirse porque existía un seguro vinculado a una hipoteca que garantizaba la amortización del préstamo impidiendo que tuviese esa familia que abandonar una casa. Estas son las cosas que probablemente tendremos que seguir poniendo encima de la mesa".

Con 2018 ya vencido pero a falta de disponer de las estadísticas de cierre, la presidenta de la patronal del seguro es optimista cuando se le pide un balance del ejercicio y augura que presentará "un crecimiento moderado, pero por encima del crecimiento de la economía". "Con lo cual, la aportación sectorial seguirá siendo mejor que la de otros sectores económicos", subraya, convencida de que "para 2019 podemos aventurar una situación similar".

El empuje se apoya "mucho" en la evolución de la actividad económica, con el impulso de los seguros patrimoniales; y un comportamiento "positivo" de los productos de vida gracias a que el ahorro gestionado continúa creciendo pese al escenario de tipos bajos, detalla; y anticipa que registrará progresiones en todos los ramos (autos, salud, patrimoniales, vida riesgo, etc).

El sector facturó 48.210 millones de euros hasta septiembre, con aumentos interanuales del 3,99% en los ingresos de no vida y del 2,99% en el ahorro gestionado por el negocio de vida, conforme a las últimas estadísticas hechas públicas por el servicios de estudios del sector asegurador ICEA.