Sánchez hizo esta propuesta durante su comparecencia ante el Pleno del Parlamento Europeo que esta semana se reúne en Estrasburgo (Francia) y que este miércoles recibe al presidente español para que exponga su visión sobre el futuro de la UE.

En su discurso inicial, Sánchez presumió de haber conformado el gobierno “con más mujeres de la OCDE”, lo cual vendió como un “hito” al que deben seguir otros pasos, porque “queda mucho camino por recorrer” por la verdadera igualdad entre sexos.

Sánchez propuso en concreto que la UE desarrolle una “Estrategia Europea en Igualdad de Género con carácter vinculante” para afrontar el problema de la brecha de empleo y combatir la “precariedad” que sufren las mujeres porque considera que el siglo XXI es de ellas.

Pidió expresamente que los presupuestos comunitarios doten de fondos esta estrategia y que incluya programas específicos contra el problema de la violencia de género, con la inclusión de derechos sexuales y reproductivos y la puesta en marcha de una directiva comunitaria por la conciliación familiar.

El presidente español también destacó en clave social la necesidad de avanzar “en el pilar de los derechos sociales y de la igualdad de oportunidades” y puso énfasis en conveniencia de un Programa de Garantía Europea para la Infancia que combata la pobreza y la desigualdad de los niños y proteja sus derechos fundamentales. En concreto, apostó por garantizar la asistencia médica gratuita, el derecho a la educación, un cuidado infantil de calidad y un derecho a la nutrición adecuada.

ELECCIONES DE MAYO

Sánchez también habló en su discurso de las reformas económicas que la UE tiene pendiente llevar a cabo y que considera necesarias para evitar problemas futuros como los vividos a raíz de la crisis financiera de 2009.

Advirtió de que la moneda única “seguirá estando incompleta” sin reforzar la unidad bancaria y sin acometer una integración fiscal “para atenuar los efectos adversos ante eventuales crisis”.

Sánchez, que nada más comenzar su intervención se definió como un “apasionado europeísta”, apuntó que la “mayor debilidad” de la UE sería la división y por ello reivindicó el “triángulo virtuoso” que representan la democracia, el progreso económico y el bienestar social.

Finalmente, advirtió de que las elecciones europeas del próximo mes de mayo son una “prueba crucial frente a quienes sembraron de cenizas esta tierra hace décadas” y ahora recuperan discursos del “odio” que fragmentan las sociedades.

Sánchez alertó del riesgo que supone la extrema derecha y pidió “resistir a los cantos de sirena de quienes sólo persiguen destruir” los valores europeos. Por ello, proclamó que “la paz y la democracia nunca pueden darse por sentadas” y, ante el auge de Vox en España, criticó a quienes “condicionan la agenda” con discursos extremistas pero también a otros partidos que se dejan “arrastrar” por esas ideas.