Ciudadanos pide al Gobierno que descontamine “unilateralmente” Palomares

MADRID
SERVIMEDIA

Ciudadanos ha registrado una proposición no de ley en el Congreso de los Diputados en la que insta al Gobierno a que inicie “unilateralmente y sin más dilación” la descontaminación radiológica del área de Palomares (Almería) afectada por la caída de cuatro bombas termonucleares por el accidente de dos aviones de las Fuerzas Aéreas estadounidenses en 1966.

Con esa iniciativa, recogida por Servimedia y que deberá ser debatida y votada en la Comisión de Transición Ecológica de la Cámara Baja, Ciudadanos propone al Ejecutivo que comience la descontaminación radiológica de Palomares según los criterios radiológicos establecidos por el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) en 2003 para que, una vez finalizada, la dosis efectiva al público sea inferior a un milisievert al año en todas las áreas afectadas.

Además, la formación naranja quiere que el Gobierno ordene al CSN que complete un plan de rehabilitación con el desarrollo detallado de la ingeniería del proyecto y la especificidad operacional y administrativa, con cinco planes y estudios en colaboración con la administración local y autonómica sobre impacto radiológico al público e impacto ambiental de la zona, proyecto de instalaciones auxiliares y lugar de almacenaje temporal operativo, protección radiológica de los trabajadores, gestión de residuos radiactivos y vigilancia radiológica ambiental.

"COYUNTURA FAVORABLE"

Ciudadanos también pretende que el Gobierno realice las reformas normativas y operacionales precisas para el almacenaje provisional del material retirado en el cementerio de El Cabril (Córdoba) “hasta que se dé la coyuntura favorable para la devolución a sus legítimos propietarios”.

Este grupo parlamentario señala en la proposición no de ley que algo más de cinco décadas llevan los vecinos de Palomares y Villaricos y parte del término municipal de Vera conviviendo con áreas contaminadas de plutonio y americio al colisionar un bombardero estratégico y un avión nodriza del ejército de aire norteamericano en enero de 1966.

Debido a ese accidente, cayeron cuatro bombas de hidrógeno de gran potencia, dos de las cuales explosionaron su carga convencional, generando así la dispersión del combustible nuclear debido al fuerte viento de la zona.

Actualmente hay 40 hectáreas valladas con restricción de uso repartidas en cuatro parcelas. “Salvo algunos puntos contaminados fuera del vallado, el resto no supone un riesgo para la salud mientras no se remuevan las tierras, pero el estigma social y económico suma y sigue desde 1966 y se agranda día a día como una losa que han de arrastrar los vecinos”, apunta Ciudadanos.

(SERVIMEDIA)
19 Ene 2019
MGR/nbc