Así lo subrayaron a Servimedia fuentes de ambas partes, que suscribieron en octubre un acuerdo para sacar adelante los Presupuestos que el Consejo de Ministros aprobó el pasado día 18.

Desde el PSOE y el Gobierno desligan que el voto en contra de Unidos Podemos a los decretos-ley del alquiler y de trasposición de directivas europeas sobre transportes ferroviarios pueda poner en peligro el acuerdo presupuestario. “Son cosas totalmente distintas”, repiten.

No obstante, algunas voces socialistas alertan que esta postura de Unidos Podemos genera una “mala imagen” para la izquierda y su trabajo en beneficio de los ciudadanos. Lamentan que, pese al acuerdo para Presupuestos, ahora no sean capaces de llegar a más acuerdos en cuestiones con reflejo directo a la sociedad.

Contraponen esto algunas fuentes de la dirección del PSOE señalando que, mientras en Andalucía la derecha “traga con carros y carretas”, la izquierda se fija en el “pelo de una gamba” y se frenan los “avances”.

Así las cosas, un miembro del Ejecutivo socialista reflexionó sobre la diferencia entre la socialdemocracia, que busca de manera progresiva el “avance”, mientras que otros de izquierdas sólo ansían “el paraíso”.

"BUENA SINTONÍA"

Desde Unidos Podemos dieron por válida esta interpretación al remarcar que sigue existiendo "buena sintonía" entre ambas partes y voluntad por la suya de sacar adelante los Presupuestos. "Pero somos dos formaciones políticas distintas y tenemos discrepancias en algunos temas", explicaron.

En particular, destacaron que el poner un tope al precio del alquiler es una reivindicación "crucial" de Unidos Podemos y que insistirán en ella "hasta el final".

El hecho de que el decreto del Gobierno no incluyera un control expreso ni diera facultad a los ayuntamientos para intervenir en barrios tensionados provocó el rechazo de este grupo parlamenario.

"Está en el acuerdo", recordaron además las fuentes consultadas, remarcando que el control de precios se pactó por el Gobierno y Unidos Podemos en octubre, y que este texto se ha de cumplir "al 100%", incluyendo las medidas que no sean estrictamente de carácter presupuestario, para garantizar el voto a favor de este grupo.