La Semfyc exigió, a través de un comunicado, “medidas correctivas tanto inmediatas como a medio y largo plazo” así como que el Ministerio actúe como “garante” del cumplimiento del real decreto por el que se dictan normas en relación con la formación especializada en Medicina Familiar y Comunitaria de los Licenciados en Medicina.

Junto a ello, demandó a administraciones y facultades de Medicina que impulsen una “discriminación positiva” en favor de la especialidad de Medicina de Familia y Comunitaria para hacer frente a la escasez de profesionales de esta especialidad y debido a la inminente jubilación de las primeras promociones de médicos de familia.

También urgió a preparar al sistema para enfrentarse a la “pandemia” de enfermedades crónicas no transmisibles y al incremento de pacientes crónicos complejos con pluripatología así como a situar a esta especialidad en el “centro” del sistema sanitario como “eje” de la atención sanitaria.

Además, solicitó el incremento del número de las plazas MIR ofertadas para esta especialidad para cubrir las necesidades sociales futuras y suplir el relevo generacional de especialistas y “ceñirse” a la legalidad vigente en materia de contratación.

Para la entidad, resulta “ineludible” planificar las necesidades “presentes y futuras de médicos de familia”, así como “innovar y activar” los mecanismos necesarios para que el sistema pueda hacer frente a dichas demandas.

La Semfyc subrayó que la contratación de personal sin especialidad vía MIR “supone una ilegalidad y va en detrimento de la calidad asistencial que el Sistema Nacional de Salud presta a la ciudadanía” además de “contradecir” los criterios en los que se sustenta la formación médica especializada. “En último término, acabará poniendo en riesgo al individuo que acude a los servicios asistenciales”, apostilló.

En este punto, la Junta Permanente de esta organización atribuyó el “atajo administrativo” tomado por las consejerías de Sanidad de algunas comunidades autónomas a la “falta de previsión” y lo considera una “reacción improvisada ante una situación previsible” sobre la que la Semfyc ha advertido “repetidamente durante los últimos años”.

Una circunstancia que, unida a la “precariedad asistencial” solo contribuye, a su entender, a “agrandar un problema que a corto, medio y largo plazo pone en compromiso la calidad de un Sistema Nacional de Salud que es un referente internacional”.

Para la Semfyc, las contrataciones de médicos sin especialidad “soslaya la confianza de los médicos residentes, socava la confianza de los pacientes en los profesionales sanitarios y transmite un mensaje degradante hacia los licenciados que están cursando los cuatro años de especialidad”.