Juicio Procés

Rull justifica el veto al atraque del `Moby Dada´ en que no cumplió las normas ni informó de que era un buque de Estado

MADRID
SERVIMEDIA

El exconsejero de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat de Cataluña en el momento del referéndum del 1-O, Josep Rull, negó este miércoles en el juicio que celebra el Tribunal Supremo haber dado la orden de negar el atraque al buque `Moby Dada´ que alojó a las Fuerzas de Seguridad desplazadas a Cataluña, aunque dijo avalar la decisión de la autoridad portuaria porque su petición no cumplió las normas ni informó de que solicitaba atraque como embarcación de Estado.

La fiscal Consuelo Madrigal preguntó al exconsejero si impidió el atraque de un buque en el puerto de Palamós en el que se iban a alojar miembros de las fuerzas de seguridad, a lo que respondió alegando que desconocía que ese era su fin y que fue la autoridad del puerto la que tomó la decisión.

Rull se extendió en sus explicaciones, puesto que la Fiscalía le atribuye haber impedido que un barco destinado a alojar a policías y guardias civiles desplazados a Cataluña atracara en el puerto de Palamós.

Según dijo, "hubo dos razones” para que el puerto rechazara la petición: “Aquel buque no utilizó los mecanismos establecidos para solicitar el amarre en un puerto de la Generalitat o en un puerto del Estado. Se gestiona a través de un portal digital. Y en este caso se informó de forma verbal que querían el atraque durante 20 días para reparar los camarotes".

Explicó que el pueto de Palamós es "relativamente pequeño", con sólo dos muelles y cuyo principal negocio son los cruceros. Dadas esas circunstancias, "el puerto de Palamós tiene muchos antecedentes en rechazar largas estancias para reparación" y, además, en esas fechas el muelle comercial se encontrada “ocupado" en un espacio en el que resulta “imposible"que puedan convivir dos barcos.

Tras intentar fondear en el puerto de Palamós, el 'Moby Dada' se traslada a Barcelona y pide autorización para atracar pero no para hacer reparaciones, como alegó en su intento anterior, sino que solicita permiso como "barco hotel", según la versión dada por Rull. "El puerto de Barcelona, que es de puertos del Estado, dice que para un barco hotel no acepta su amarre" al tener todos sus espacios ocupados y no es hasta la noche del día 20 cuando el Gobierno español hace la solicitud formal de atraque como "barco de Estado", que automáticamente desbloqueó los permisos.

Rull negó haber tomado esas decisiones de manera personal, las atribuyó a las autoridades portuarias que las adoptaron “de manera seria y diligente”, y las avaló en su totalidad y negando que se tomaran de manera “arbitraria” como sostiene la Fiscalía en su escrito de acusación.

Los cruceros tienen prioridad. Rull siguió dando explicaciones sobre por qué se impidió el amarre del ferry destinado a policías y guardias civiles. Aseguró que el muelle estaba ocupado por un crucero y que no se podía desalojar porque "los cruceros son la joya de la corona del puerto de Palamós".

A continuación de la prolija explicación de Rull, la fiscal le preguntó por el tuit en el que reconocía que, “en efecto, no les hemos dejado atracar”. El exconsejero reconoció la autoría del tuit pero lo puso relación con “una noticia publicada por La Razón que decía que `así lo han confirmado fuentes de la Generalitat´” dando las razones del rechazo, que él ratificó.

Rull insistió, en todo caso, en que “no lo hice yo. Yo no autorizo como consejero la entrada o no entrada de cada barco que solicita el amarre. Lo hicieron los responsables del puerto de manera seria, responsable, diligente. Cuando el consignatario pidió los 20 días para reparación de camarotes, la respuesta fue unánime: no es viable”.

Interrogado por las defensas, Rull aseguró que sólo a través de una solicitud formal del buque, los puertos a los que solicitó el atraque podrián haber justificado no pagar por los perjuicios ocasionados a los barcos con los que tenía comprometidos servicios.

(SERVIMEDIA)
20 Feb 2019
SGR/ICG/gja