El responsable del hotel recuerda que hubo “algunas” concentraciones en las puertas de su establecimiento en contra de la presencia de los agentes. En un par de ocasiones, dijo, hubo "mucha gente" que protestaba coreando lemas como "fuera la policía", "fuera fuerzas de ocupación" e insultos.

Alrededor de 40 agentes llegaron al hotel el 12 de septiembre y el día 19 llegó otro grupo hasta alcanzar las 110 personas. El hotelero aseguró que "no recibí presiones para que desalojase a los agentes del hotel", al menos no directamente.

A continuación declaró el director del Hotel Travé de Figueres, Sergi Travé Serra, que pidió que su imagen no sea difundida. Explicó que hubo "dos concentraciones" frente a su hotel, una de “estudiantes a mediodía” en contra de la presencia de los policías y “la otra a la inversa, de partidarios, de gente que les apoyaba". Las dos fueron “pacíficas”.

Preguntado por el fiscal, el responsable del hotel de Figueres indicó que no hubo un desalojo porque los agentes “establecieron un perímetro de seguridad para evitar posibles concentraciones”.

Travé explicó después que recibió "numerosas llamadas" al hotel "para hacer presión para que se fueran". La avalancha fue tan grande que “tuvimos que cortar el teléfono". Las llamadas consistieron en insultos y amenazas de quienes pretendían que se expulsara a los agentes y que amenazaban con boicotear al hotel.