Por ello, el jefe del Servicio de Cardiología del Hospital Nuestra Señora del Rosario de Madrid, Antonio Álvarez-Vieitez, instó a controlar los factores de riesgo que pueden desembocar en el desarrollo de estas enfermedades.

Según informó el centro hospitalario a través de un comunicado, el facultativo estima imprescindible “intentar mejorar” el tratamiento fuera del hospital con la colocación de desfibriladores en lugares donde haya acumulación de personas y “entrenar” a la población en la resucitación cardiopulmonar.

A su juicio, “lo más importante para combatir la aparición de la enfermedad cardiovascular es prevenirla" y para ello "hay que luchar contra los factores de riesgo”, defendió.

En su opinión, los principales factores de riesgo prevenibles son el consumo de tabaco, el colesterol, la hipertensión arterial, la diabetes, el sedentarismo, la obesidad y el estrés.

Respecto al consumo de tabaco, subrayó que, desde el punto de vista vascular, fumar un solo cigarrillo al día aumenta el riesgo “de una forma ostensible”.

Por su parte, consideró al colesterol como el “otro gran enemigo”, por lo que abogó por fomentar desde la infancia la dieta mediterránea cardiosaludable.

Frente a la diabetes, sobre todo la tipo II del adulto, estimó “importante” la dieta, el ejercicio y combatir el sobrepeso, además del tratamiento farmacológico.

También apostó por “poner coto” a la obesidad y al estrés como “situación vital” un factor de riesgo que, matizó, “puede favorecer los otros factores de riesgo” y que es necesario “enfrentar con técnicas de relajación y atención psicológica”, resolvió.

Por todo ello, recomendó la “abstención total” del tabaco, hacer ejercicio, mantener el peso y “ser optimistas”. “Cada vez aumenta más nuestra esperanza de vida, entre otras razones porque están disminuyendo las enfermedades cardiovasculares en España”, concluyó.