En un encuentro informativo organizado en la capital por Nueva Economía Fórum, al presentar al candidato a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, Ignacio Aguado, Rivera confirmó que propondrá a Sara Jiménez para presidir el Congreso de los Diputados frente a Batet, que puede ser la primera presidenta de la Cámara que representa la soberanía nacional "que está en contra de la soberanía nacional" porque ha votado a favor de un referéndum en Cataluña.

Batet, dijo, cree que el artículo 1 y 2 de la Constitución "no son así", y que la soberanía la tienen "los territorios" y no el conjunto del pueblo español. "Eso es el sanchismo", denunció, "la pista de aterrizaje del nacionalismo" en el Congreso de los Diputados.

Rivera reiteró que Ciudadanos va a liderar la oposición ante la "descomposición" del PP, y por ello propone que el Congreso de los Diputados lo presida una persona activista, abogada, de etnia gitana, que defiende la igualdad entre todos los españoles, "justamente lo contrario de lo que defiende Batet", para contraponer "dos modelos de Estado, dos modelos de entender la política, de pelear por el país que quieres", y que se concretan en una "nación de naciones" o en una "nación de ciudadanos libres e iguales".

Se mostró convencido de que el PSOE y Podemos "mañana se quitarán las caretas" al plasmar una mayoría parlamentaria para la elección de la Mesa del Congreso de los Diputados y después para la formación de un gobierno.

Rivera confirmó también que Ignacio Prendes y Patricia Reyes serán de nuevo los candidatos de Ciudadanos para ocupar una Vicepresidencia y una Secretaría en la Mesa del Congreso, asumiendo que sus votos serán suficientes para mantener esos dos puestos, dado que ambos han hecho "una magnífica labor" y tienen experiencia para hacer frente "a los pactos de Batet con los separatistas" y a las pretensiones de "conceder privilegios a los golpistas".

Denunció, en ese mismo sentido, que el PSOE prevé ceder uno de sus puestos en la Mesa del Senado al PNV, "ya estamos con lo de siempre", con un partido que tiene el 1% de los votos estatales teniendo más representación que quienes tienen el 17%. Algunos se preguntan "por qué nos ha ido tan mal estos cuarenta años", y la respuesta es que Sánchez es "estandarte de la bajada de pantalones ante el nacionalismo". Si no, dijo, por qué ningún independentista prefiere a Ciudadanos antes que al PSOE.

Preguntado después por la política de pactos tras las elecciones del próximo domingo, insistió en que no parece haber entre los líderes territoriales del PSOE nadie que reniegue de los acuerdos con Podemos y con nacionalistas y que no se preste a ser "fontanero" de los gobiernos de Podemos. Pero "si hay alguien ahí", como decía Alfonso Guerra, añadió, "que sea valiente" y alce la mano para decirlo. Si no, concluyó que la única alternativa es Ciudadanos.