Diaz Ayuso hizo estas manifestaciones a su llegada a la sesión constitutiva de la nueva corporación municipal, donde será investido el popular José Luis Martínez-Almeida. Según dijo, la elección de su compañero de filas “es una buena noticia” para la capital que durante los últimos cuatro años ha estado dirigida por un grupo “sectario” que ha dejado la ciudad “más sucia, mucho més atascada y con más inseguridad”.

A partir de ahora, aseguró, “lo que vamos a tener en Madrid es un gobierno de pactos, que permita que Madrid siga compitiendo a nivel internacional“ y que propiciará “buenas noticias, que creemos empleo, que recuperemos la movilidad y que pongamos sobre la mesa políticas liberales que siempre han dado los mejores resultados económicos de España”.

La candidata del PP para la Comunidad de Madrid reconoció que el acuerdo en el Ayuntamiento se logró agotando los plazos y expresó su deseo de poder alcanzar un acuerdo con Ciudadanos y Vox en plazos más holgados. Para ello, dijo, el PP tiene tendida la mano a “uno y otro” en lo que considera que es la actitud idónea para llegar a acuerdos.

Insistió en que su intención es negociar “sin líneas rojas” y siempre sobre la base de “políticas que se puedan cuantificar económicamente” de manera que “cada política que se ponga sobre la mesa quiero saber cuánto cuesta y si la podemos realizar. No quiero que ningún asunto se convierta en folclore o en broncas".

Su máxima aspiración es lograr “entendernos” para que “Madrid siga siendo el motor económico de España y poder seguir bajando impuestos”. Para ello, admitió, “hay que adaptarse a las circunstancias” y pactar con Ciudadanos y Vox. “Nos guste o no nos guste tenemos que llegar a acuerdos, porque esto es lo que hay”.