ING quiere ser el primer banco en concesión de hipotecas en 2019 o principios de 2020

- Su consejero delegado admite que la banca ha encarecido los préstamos por la reforma hipotecaria sin repercutir del todo los costes adicionales que asumirá

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SERVIMEDIA

ING aspira a convertirse en el primer banco en concesión de hipotecas en España a finales de 2019 o principios de 2020, después de haber logrado alcanzar una cuota del 9,4% a finales del pasado mes de marzo en la nueva producción y que ya solo superan Santander, BBVA y Caixabank.

Así lo afirmó hoy el consejero delegado de ING España y Portugal, César González-Bueno, como "aspiración, no como compromiso" durante unas jornadas organizadas por la Asociación de Periodistas de Información Económica (Apie) en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) de Santander con el patrocinio de BBVA sobre finanzas sostenibles.

La entidad ha pasado de copar dicha cuota tras elevar un 43% la nueva concesión y firmar préstamos para adquisición de vivienda por valor de 942 millones de euros durante el primer trimestre del actual ejercicio.

Supone una aceleración en su crecimiento ya que el pasado año aumentó la formalización un 34%, pasando a financiar 3.157 millones de euros, frente a los 2.361 millones otorgados en 2017.

El efecto inmediato es que su cuota en las nuevas firmas escaló así del 6,5% en 2017, al 7,5% en 2018 para ampliarse posteriormente al 9,4% del pasado mes de marzo y con intención de llegar a una expansión "de doble dígito" en los próximos meses -para superar o empatar al banco más activo debería alcanzar el 15%-.

El banquero aseguró que no ha logrado la mayor penetración bajando precios sino mejorando la percepción del cliente con el servicio, como lo revela que su satisfacción haya pasado de arrojar una puntuación de 3,8 sobre un máximo de cinco hace año y medio al 4,7 actual.

"El 3,8 en 2017 está bien, pero no es diferencial. Nadie sale a decirle a sus amigos que tal hipoteca de ING es fantástica (...) pero con el 4,8 el cliente hace de altavoz", explicó.

Dicha experiencia estaría detrás de que ING logre captar un mayor número de operaciones cuando el cliente se dispone a buscar crédito para su casa, ya que "normalmente la gente pide de media tres hipotecas" a distintas entidades para elegir entre ellas.

La clave que indicó sería su estrategia de apostar por "mucha más transparencia", "mucha más capacidad de elección del cliente", sin ofertas "ocultas ni complejas" y sin comisiones, y la decisión de poner en montar un equipo de gestores que acompañan al cliente durante todo el proceso de información y formalización del préstamo.

A título de ejemplo de la mejora de esta apuesta indicó que mientras antes recibían cuatro llamadas de media por cliente por hipoteca, ahora es "prácticamente una porque todo está mucho más ordenado" con esas comunicaciones.

Al ser cuestionado por la nueva reforma hipotecaria, que cargará a la banca los gastos de constitución de notaría, registro y gestoría mientras que el cliente ya solo tendrá que soportar el coste de la tasación, confirmó que la banca ha reaccionado encareciendo el préstamo pero sin llegar a trasladar el coste íntegro de sus nuevos gastos.

"No he visto a nadie que no haya hecho nada de adaptación, y no he visto a nadie que haya hecho la adaptación completa", refirió, si bien precisó que, a pesar del “incremento de precios", éstos son ahora "marginalmente menos rentables que eran antes de los cambios de legislación".

El banquero considera que la nueva ley de crédito inmobiliario será "sanísima" y "buenísima" porque dará "más garantías al cliente", con mayor protección y produciendo más seguridad jurídica para los bancos.

En su opinión "todo lo que sea transparencia", lanzar el "juego con las cartas boca arriba" es bueno y favorecerá además a ING, dada su estrategia de máxima sencillez y claridad.

En relación a las alertas del Banco de España sobre los riesgos y "no relajar los criterios de concesión" para evitar morosidades, González-Bueno lo consideró lógicos al ser esa la tarea prudencial del supervisor.

Sin embargo, mostró su convicción de que "parece" que las entidades han "aprendido la lección" y ya no se dan las financiaciones del cien por cien del valor del inmueble de antaño, o créditos al consumo donde no estaban claros los criterios de repago.

(SERVIMEDIA)
18 Jun 2019
ECR/gja