Así lo dijo el máximo responsable de la organización empresarial durante su intervención en la Asamblea General anual que celebró en Madrid y que es la primera que Garamendi preside, después de que fuera elegido presidente de CEOE el pasado mes de noviembre y en la que aprovechó para agradecer a su antecesor, Juan Rosell, su trabajo.

El representante de los empresarios en España comenzó su discurso apelando a la “responsabilidad” de los partidos políticos para formar Gobierno, la “estabilidad” y la “moderación”, ante las dificultades para que se produzca un acuerdo que dé lugar a un nuevo Ejecutivo.

Garamendi subrayó que “si hacemos los deberes y estamos mejor colocados que los demás, no tendremos problemas”, dado el contexto internacional marcado por la guerra comercial, la desaceleración económica y el ‘Brexit’.

El presidente de CEOE citó la digitalización, la globalización y la transición ecológica como los principales retos que se presentan para España.

Citó la falta de inversión en I+D+i, del 1,3% del PIB en España frente al 3% en el mundo; la escasez de participantes en la formación profesional dual; una gestión de la transición ecológica sin “demagogias” y adecuada, o el objetivo de que la industria tenga un peso del 20% sobre el PIB en 2020 y permita que haya más empleos estables.

Por otra parte, Garamendi quiso referirse a la fiscalidad como “otra forma de romper la competitividad de las empresas”. En este sentido, manifestó preocupación por el nivel de la deuda pública, en el 98%, y el déficit público, y apuntó que desde CEOE se va a “poner el foco en la eficiencia del Estado, de forma leal, de forma positiva”, con propuestas de mejora.

Expuso que la presión fiscal en España es superior a la media europea y que las cotizaciones sociales son un “impuesto”, situado en el 30% en España mientras que en la UE es del 25%, al tiempo que “la subida del gasto público en España es del 4,4% frente a la subida del PIB del 2,4%, y, sin embargo, nadie habla de qué pasa con la economía sumergida”.

Garamendi reclamó menos trabas para las empresas, más unidad de mercado y estabilidad regulatoria. “Los inversores van a estar en este país cuando haya estabilidad regulatoria, cuando sea predecible” y “homogénea”, dijo.

"DIÁLOGO SOCIAL Y NO REALES DECRETOS"

En referencia al trabajo de CEOE en el marco del diálogo social con los sindicatos, el presidente de la patronal valoró que esa labor es “la mayor infraestructura de nuestro país” y que los interlocutores sociales “siempre seguiremos sentados”.

“Digo diálogo social y no reales decretos, que lo que han hecho es regular en algunos casos mal”, puntualizó. Insistió en que estos decretos suponen “contratos de adhesión donde no nos dejan ser actores” y se refirió directamente al que regula el registro obligatorio de jornada para decir que “si nos llegan a dejar sentarnos en una mesa, posiblemente hubiéramos hecho ese control de jornada de una forma más ordenada, porque nadie está diciendo que no se paguen las horas”.

En cuanto a la situación interna de la organización, Garamendi apostó por una “CEOE más fuerte, participativa, transparente”, que ya cuenta con más de 4.000 organizaciones. En este punto, quiso agradecer al presidente de la federación de autónomos ATA, Lorenzo Amor, por haberse incorporado a la organización.

GÉNERO

También defendió que la patronal tiene como objetivo la igualdad de género y señaló que, con las últimas incorporaciones al equipo directivo, CEOE cuenta con un 63% de mujeres en la plantilla. “Están porque son los mejores”, justificó Garamendi. Tras el acto fue preguntado sobre quiénes ocuparán las cinco nuevas vicepresidencias y se limitó a decir que "alguna mujer habrá".

En su discurso, apuntó que se va a refundar el Instituto de Estudios Económicos, para el que ha sido elegido presidente recientemente Íñigo Fernández de Mesa; se va a crear un premio asociado al proyecto Promociona con el que la patronal promociona a directivas españolas; se va a plantear una nueva escuela de empresarios y se dará más contenido a la Fundación CEOE.

Garamendi también aprovechó para hacer un llamamiento a los empresarios a que marquen la ‘X Solidaria’ asociada al Impuesto de Sociedades por ser “un acto de responsabilidad y un acto de solidaridad”.

“Tenemos un gran país, y tenemos las mejores personas dentro del país, tenemos muchísima gente estupenda, tenemos todos el reto de ponerlo donde hay que ponerlo, en primer nivel en el mundo”, concluyó.