Pacientes y médicos valoran más la innovación en los medicamentos que las administraciones públicas

MADRID
SERVIMEDIA

Pacientes y médicos valoran más que administraciones públicas y legisladores las ‘innovaciones incrementales’, concepto que se utiliza para referirse a variaciones en la formulación y el concepto original de fármacos ya comercializados, que se utilizan para una mayor rapidez de actuación, mayor facilidad de uso o mejoras en la eficacia del compuesto y en la adherencia del paciente al tratamiento, según concluye un estudio de la consultora Iqvia.

En la última década, alrededor del 40% de los fármacos innovadores que han llegado al mercado se enmarcan en el concepto de innovaciones incrementales. No obstante, un estudio elaborado por la consultora especializada -por encargo de la Federación Europea de la Industria Farmacéutica (Efpia)- refleja una severa discrepancia en la percepción del valor añadido que ofrece la innovación incremental a reguladores y pagadores frente a pacientes y médicos.

Según el informe, los primeros raramente la entienden como un progreso frente a los tratamientos ya existentes, mientras que los segundos sí consideran estas mejoras como un avance importante para el abordaje de la enfermedad.

Farmaindustria explicó que el estudio analiza cómo ha sido contemplado históricamente en Europa el valor de estos nuevos fármacos desde una perspectiva integral, no sólo clínica, por las administraciones públicas y otros agentes decisores en materia de precio y reembolso. Y lo hace considerando las diferencias de evaluación entre distintos productos, áreas terapéuticas y países.

En general, según explica el informe, médicos y pacientes reconocen la notable aportación terapéutica de estas innovaciones y las sitúan al mismo nivel en términos de valor añadido que a los fármacos que presentan mecanismos de acción completamente nuevos. En cambio, reguladores y pagadores, mientras sí reconocen el valor añadido a esos medicamentos radicalmente innovadores, se resisten a hacerlo con las distintas fórmulas de mejora que se agrupan bajo el concepto de innovación incremental.

Según Farmaindustria, la baja estima que pagadores y reguladores tienen de estos fármacos impacta directamente en los procesos de aprobación y fijación de precio. La media de las decisiones de las agencias nacionales al respecto es siempre inferior al precio fijado para el medicamento de referencia en esa indicación, llegando a reducciones de entre el 15% y el 20% en países como Italia, España, Suecia y Holanda.

El estudio propone que pacientes y profesionales sanitarios participen en los procesos de evaluación de tecnologías sanitarias, incluir en esa evaluación información sobre la experiencia de uso del producto, incorporar información adicional de un fármaco tras su lanzamiento que permita reevaluarlo y considerar mejor el valor global que aporta, junto a la consideración por parte de los reguladores y pagadores de la opinión de otros agentes del sector (pacientes, profesionales sanitarios, etcétera) para la fijación del precio más justo.

(SERVIMEDIA)
18 Jul 2019
VMM/gja