Explicó que su departamento, a través de la Fundación RAIS, pone a disposición de las personas sin hogar un recurso, dotado con 40 plazas, que favorece que las personas sin hogar puedan abandonar la atención hospitalaria garantizando el entorno y los apoyos adecuados para el seguimiento ambulatorio de su enfermedad.

Moreno, que hizo estas declaraciones durante su visita al centro ‘Carmen Sacristán’ de la Fundación RAIS, agregó que de las 65 personas atendidas en los primeros seis meses de 2019, 47 son hombres y 18 mujeres, con una media de ocupación del centro de casi el 100% .

Asimismo, manifestó que este modelo de atención a las personas sin hogar “es un proyecto pionero en España que brinda una residencia a personas sin hogar con enfermedad crónica y en procesos de convalecencia tras su ingreso hospitalario. Son personas que reciben cuidados paliativos o con necesidad de apoyos para realizar las actividades básicas de la vida diaria”.

Indicó que este dispositivo atiende cada año a alrededor de 100 personas para que puedan “recuperarse tras ingresos hospitalarios y seguir los tratamientos médicos pertinentes que no podrían recibir en caso de permanecer en la calle”.

Los residentes permanecen en el centro mientras precisen de cuidados, hasta el momento de recuperar su autonomía y poder realizar vida normal, y, en el caso de las personas residentes con tratamiento paliativo, su estancia es indefinida.

Los usuarios, que acuden voluntariamente a este centro, son personas mayores de edad que no cuentan con plaza de carácter residencial en ningún centro público ni privado, salvo en centros de acogida o albergues.

El 69 % de las persona atendidas en este recursos tiene nacionalidad extranjera y el 65% carece de ingresos económicos cuando llegan al centro.

Dentro del perfil sanitario, el 60,4 % de las personas atendidas son convalecientes de procesos de traumatología, oncológicos e intervenciones quirúrgicas; el 26,7 % son personas con enfermedades crónicas (enfermedades vasculares, respiratorias, infectocontagiosas, diabetes y nefropatías). El 12,9 % de las personas atendidas reciben cuidados paliativos.

Moreno recordó que la Comunidad de Madrid aprobó en 2016 el Plan de Inclusión de Personas sin Hogar 2016-2021, dotado con un presupuesto de casi 170 millones de euros y 76 medidas que está organizado en cinco ejes: articulación y coordinación de recursos; sensibilización, prevención y protección; cambios en el modelo de alojamiento; autonomía, activación y empleabilidad; y mejora de la información disponible.

Asimismo, dijo que la Comunidad de Madrid introducirá en los próximos meses el modelo de atención a personas sin hogar, conocido como ‘Housing First’ -Primero Hogar-, que permite el acceso inmediato a una vivienda a personas que pernoctan en la calle y que se encuentran en situación de especial vulnerabilidad.

El proyecto, dotado con un presupuesto de 500.000 euros, se iniciará con 20 viviendas ubicadas en municipios de la Comunidad de Madrid con más de 60.000 habitantes, donde los beneficiarios serán personas mayores de 18 años, sin hogar, con problemas de salud mental, adicciones y discapacidad.

Una vez ubicada la persona en la vivienda, se inicia un proceso de acompañamiento e intervención social con el objetivo de lograr que sea autónoma a todos los niveles: económico, doméstico y social.