Cada vez más parejas madrileñas optan por convivir bajo la fórmula de pareja de hecho. En total, 46.094 parejas han acudido a inscribirse bajo este régimen, que regula la convivencia de una forma mucho más suave que el matrimonio. De todas ellas, casi el 16 % (7.223) cancelaron su inscripción. Es decir, formalizaron su ruptura.

Así se desprende de los datos del registro de uniones de hecho de la Comunidad de Madrid recogidos por Servimedia. La regulación de este tipo de parejas es distinta en cada autonomía: ni La Rioja, Castilla y León ni Castilla-La Mancha cuentan con una ley específica de parejas de hecho, mientras que en Galicia se regula a través de una Disposición Adicional.

En el caso de Madrid, la ley se aprobó en diciembre de 2001 y considera uniones de hecho “a las personas que convivan en pareja, de forma libre” durante un año de forma ininterrumpida y que se hayan inscrito en el Registro autonómico.

En 1995, año en que se abrió dicho Registro, se inscribieron nueve parejas: ocho heterosexuales y una homosexual femenina. Por su parte, de las 4.292 que se inscribieron el año pasado 3.828 fueron heterosexuales, 163 homosexuales femeninas y 301 homosexuales masculinas.

Desde enero de este año se han registrado 2.418 parejas heterosexuales, 129 parejas lesbianas y 189 gays.

DIFERENCIAS CON EL MATRIMONIO

En términos jurídicos, la pareja de hecho no es equiparable al matrimonio. Entre otras diferencias, cuando dos personas se casan tienen que optar por el régimen de gananciales o de separación de bienes, mientras que si una pareja de hecho quiere regular su régimen económico tiene que ir al Notario obligatoriamente.

También hay diferencias significativas a la hora de hacer testamento, ya que, como norma general, la pareja de hecho no heredará nada salvo que así se indique explícitamente en las últimas voluntades del fallecido; mientras que, si estuvieran casados, el Código Civil reconoce a la persona viuda el usufructo del tercio de mejora.

Además, la ley de la Comunidad de Madrid equipara a estas parejas con los matrimonios “en relación con el personal al servicio de la Administración de la Comunidad de Madrid” y respecto a “los derechos y obligaciones establecidos en la normativa madrileña de Derecho Público” que afectan a las personas que sí han optado por casarse.

El aumento en el número de parejas registradas durante 2018 supone un máximo histórico. De hecho, la cifra lleva creciendo ininterrumpidamente desde 2001, cuando se inscribieron solamente 29 parejas; salvo en 2012, cuando el dato cayó de 3.836 a 2.631 nuevas uniones de hecho.

13 PAREJAS ROTAS EN 2019

La ley madrileña también establece una serie de motivos por los que una pareja de hecho puede disolverse: puede suceder por acuerdo entre los dos miembros; porque uno de ellos lo decida unilateralmente y, además, lo comunique al otro; por la muerte de una de las personas; por una separación de más de seis meses; o, finalmente, porque uno de los miembros se case.

Durante el año pasado, 116 parejas anunciaron su ruptura en Madrid, y el peor mes fue abril, cuando se rompieron 30 de estas uniones. Si comparamos el número de parejas inscritas ese año con las que notifcaron su disolución, estas supusieron únicamente el 2,7%.

Por su parte, entre enero y agosto de 2019 se han roto 13 parejas; por lo que el número de uniones dadas de baja no supone siquiera el 0,5% de las inscritas.

La ley de la Comunidad de Madrid regulaba también el régimen económico de las uniones de hecho, pero el Tribunal Constitucional declaró nulo esos artículos por entender que estaban regulando una materia para la que esta autonomía no tenía competencias.