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Huelgas

Ábalos plantea revisar la fijación de servicios mínimos para ajustarlos mejor al impacto real de la huelga

- Destaca “bajo seguimiento” y “normalidad” en las huelga de Renfe y El Prat

MADRID
SERVIMEDIA

El ministro de Fomento en funciones, José Luis Ábalos, se mostró hoy partidario en el Congreso de estudiar una nueva forma de fijación de servicios mínimos en las huelgas que permita "ajustar" mejor estos a la estimación e impacto real del seguimiento.

Ábalos compareció en la comisión parlamentaria a petición propia y de la oposición para hacer balance de las huelgas de este verano en El Prat y en Renfe.

Aseguró que los servicios mínimos, que “se cumplieron totalmente” en estas protestas, “es verdad que han sido posiblemente excesivamente prudentes respecto del impacto de la huelga”. “No hay proporción” entre esos servicios establecidos y los vuelos y trenes cancelados.

“Posiblemente esto sí que exigiría una revisión, pero si eleváramos más los servicios mínimos, pasaríamos como que obstaculizamos el derecho de huelga”, agregó el ministro, “pero es verdad que habría que estudiar un mecanismo de previsión que, sin incurrir en impedir el derecho de huelga, ajustara al menos una posible estimación respecto de lo que nos obligan. Así como en el sistema aéreo es predecible, porque hay nombres y apellidos, en el tema de trenes es más complicado, y uno no sabe cuántos van a ir a la huelga”.

"AGOSTO TRANQUILO"

En su comparecencia, el ministro de Fomento se congratuló por el “escaso seguimiento” que dijo que han tenido este verano la huelgas en Renfe y la “relativa normalidad” en los paros del aeropuerto Josep Tarradellas El Prat-Barcelona.

“Ha sido el agosto más tranquilo en muchos años en conflictividad laboral”, afirmó Ábalos, para quien la labor mediadora del Gobierno y las medidas adoptadas para mitigar el impacto en los usuarios han hecho posible que los efectos negativos de las huelgas se dejaran sentir con menor calado.

De la huelga en Renfe, el ministro dijo que la convocatoria de paros de CCOO del pasado 15 de julio solo fue secundada por un 6% de la plantilla afectada (260 de 4.100 trabajadores) y la de CGT en varias jornadas de julio, agosto y septiembre tuvo un eco aún menor, un 2%, con 100 empleados de 5.100 llamados a la protesta.

En el caso de El Prat, la huelga de vigilantes de seguridad de la empresa Trablisa en agosto y la de trabajadores de tierra de Iberia en julio y agosto se han dejado sentir poco en la operatividad de vuelos, que funcionó con relativa normalidad”, y en la incidencia a los clientes, según Ábalos.

El titular de Fomento dijo que el buen hacer de Aena para mitigar las incidencias se ha traducido en que “no ha habido un aumento significativo de reclamaciones hasta el 31 de agosto, solo 38 por la huelga de Trablisa y 3 por la Iberia”.

En cuanto a la responsabilidad del Gobierno, indicó que en el caso de El Prat se ha tratado de un conflicto laboral entre empresas privadas y empleados, y el ministerio y Aena lo que han podido hacer a posteriori de las convocatorias es asistir como mediador y paliar los efectos a los ciudadanos, y antes, vigilar por el cumplimiento de las licitaciones a esas empresas.

MÁS CON EL PP

Por lo que se refiere a Renfe, el ministro adujo que no han podido ser atendidas las demandas de los sindicatos sobre tasa de reposición, disminución de jornada y consolidación de retribución de productividad.

Ábalos se felicitó por el “escaso seguimiento” y daño a los ciudadanos de las protestas, porque el Gobierno está haciendo “un esfuerzo” negociador en las mesas de los convenios colectivos de las grandes empresas dependientes de su departamento como Renfe.

Eso se ha saldado, agregó, “en que han sido muchas más las convocatorias de huelga anunciadas que las finalmente realizadas”.

Y en el caso de las huelgas aeroportuarias, llamó la atención sobre el hecho de que cuando gobernaba el PP se produjeron protestas similares en el verano de 2017 y “ahora, con los mismos servicios mínimos, la incidencia ha sido menor”.

Desde la oposición, Andrés Lorite, del PP, acusó al Gobierno de “derivar responsabilidades” y echar las culpas siempre a los demás en los conflictos laborales.

Por Ciudadanos, Miguel Ángel Garaulet pidió más al Gobierno para evitar huelgas en empresas adjudicatarias, y Rafael Mayoral, de Unidas Podemos, consideró llamativo que haya huelgas que afectan a Aena, “cuya privatización está lastrando la buena prestación de servicios”, y en Renfe, protagonista del “despiece” y la liberalización del sector ferroviario”.

(SERVIMEDIA)
12 Sep 2019
JRN/gja