Así lo puso de manifiesto este jueves la ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social en funciones, María Luisa Carcedo, que presidió el acto de entrega, en el que precisó que estos jóvenes son “ejemplos de la esperanza en el futuro”, por lo que consideró “muy justo y acertado” el fallo del jurado.

Les agradeció su “ahínco, ejemplo y esfuerzo, en algunos casos casi sobrehumano, para alcanzar logros en áreas con muchísimo recorrido para el futuro” y reconoció que algunos de los desafíos que afronta actualmente la sociedad son “urgentes para la juventud”.

Entre ellos mencionó la estabilidad laboral al tiempo que consideró “insuficientes” los esfuerzos realizados hasta ahora para abordar un problema que, a su entender, “no puede estar relacionado de forma indisoluble a la juventud”.

La ministra aseguró que España “quiere a gente como Sandra Timón, la primera persona sordociega contratada por Microsoft España, ejemplo de lo que significa romper barreras en el ámbito social y laboral” y por el que ha recibido el Premio Nacional de Juventud 2019 en la categoría de Compromiso Social.

En la misma línea, felicitó a Francisco Javier García, premiado en la categoría de Deporte por su iniciativa 'Un mundo con sentido' que, a su juicio, ha “abierto una ventana a los proyectos de superación del mundo del deporte” así como a Pedro Javier Gómez, ingeniero de la salud y Premio Nacional de Juventud 2019 en el área de Ciencia y Tecnología, por su “aportación tan importante a la investigación”.

PREMIADOS

La Premio Nacional de Juventud 2019 en Compromiso Social, Sandra Timón, desarrolladora de software en Microsoft España agradeció el apoyo de la Fundación ONCE para la Atención de Personas con Sordoceguera (Foaps), que le ha permitido ser la primera persona con discapacidad contratada por Microsoft.

Timón aprovechó su intervención para “concienciar de que existen personas con otras capacidades y de que, si tienen los recursos y adaptaciones necesarias, pueden conseguir todo lo que deseen porque las limitaciones no existen”.

En la misma línea, el asesor jurídico en Ilunion y deportista sordociego Francisco Javier García, Premio Nacional de Juventud 2019 en la categoría de Deporte, afirmó que el galardón “invita a creer en la inclusión”. “Por mi y por todos mis compañeros sordociegos”, agregó, al tiempo que advirtió de la necesidad de contar con “muchos recursos y apoyo” para “normalizar” la situación de jóvenes como él, por lo que agradeció el apoyo de la ONCE e Ilunion.

El Premio Nacional de Juventud en Ciencia e Innovación, Pedro Javier Gómez, investigador de la Universidad de Sevilla adscrito al departamento de Biología Celular, estimó “muy importante invertir en investigación porque muchas personas dependen de ello”.

Finalmente, la veterinaria de campo y escritora María Sánchez, premiada en la categoría de Cultura, reconoció que el premio “significa que existe y se da nombre al medio rural y a sus habitantes, que también son cultura” y la ingeniera en Química Industrial e investigadora del reciclado del material compuesto Andrea Fernández, premiada en la categoría de Medio Ambiente, admitió que, con él, “se valora e incentiva la importancia de la investigación”.

El Injuve convoca anualmente estos premios para estimular y reconocer la trayectoria y el esfuerzo de aquellos jóvenes que por su dedicación en su trabajo y su implicación personal ponen de manifiesto su compromiso en distintos ámbitos de la sociedad.

Cada uno de los premios tiene una dotación de 2.000 euros y la categoría de Derechos Humanos ha quedado desierta. Junto a los premiados, han recibido una mención honorífica Ana María Valle y María Elisa González, en las categorías de Compromiso Social y Cultura, respectivamente.