Día Mundial Ictus

La Fundación Jiménez Díaz pone en marcha una Escuela de Ictus

MADRID
SERVIMEDIA

El Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz ha puesto en marcha la Escuela de Ictus, una iniciativa bimestral dirigida a pacientes y familiares para darles apoyo desde la etapa inicial, resolver sus dudas y capacitarlos ante la nueva condición médica, familiar, social y laboral a la que deberán adaptarse.

“Desde nuestra experiencia atendiendo ictus nos dimos cuenta de que, además de la atención médica de emergencia inicial y durante la estancia hospitalaria, es muy importante llevar a cabo una labor de formación e información para darles recursos con los que afrontar el daño cerebral”, señalan las doctoras Raquel Cutillas, médico adjunto del Servicio de Rehabilitación de la Fundación Jiménez Díaz, y María Araceli García, especialista en Neurología del hospital.

El ictus es una alteración brusca del flujo sanguíneo cerebral en la que una parte o todo el encéfalo se encuentra afectado por un problema en los vasos sanguíneos. Según datos de la Sociedad Española de Neurología, en España alrededor de 110.000-120.000 personas sufren un ictus anualmente y, de ellas, un 50 por ciento fallece o queda con algún tipo de discapacidad.

La Escuela de Ictus, formada por el equipo multidisciplinar que también integra la Unidad de Ictus del hospital, busca la prevención secundaria, la detección precoz de los síntomas en caso de nuevos episodios o la atención a las múltiples dudas que surgen tras padecer un ictus, tanto en el ámbito médico como en el sociosanitario, explican desde el hospital de la Fundación Jiménez Díaz.

Para la primera sesión de la Escuela de Ictus, que tendrá lugar este martes coincidiendo con el Día Mundial del Ictus, se han programado charlas informativas sobre las principales esferas que se ven afectadas tras el ictus. En ellas, se proporcionarán pautas globales de actuación para que cada paciente y su familia comprendan mejor el proceso, optimicen su nueva situación y desarrollen distintas estrategias para enfrentarla. Además, supondrán una oportunidad para conocer a otras personas o familias en situaciones similares.

“Estamos abiertos a sugerencias y puntos de interés específicos que puedan plantearse en el taller”, aseguran estas expertas que insisten en que, para conseguir la mayor recuperación, adaptación e integración, se requiere de una participación activa. “De esta forma disminuiremos las complicaciones y obtendremos el máximo rendimiento de nuestras terapias”, aseguran las doctoras Cutillas y García.

(SERVIMEDIA)
28 Oct 2019
VMM/gja