Así lo indicó en declaraciones a los medios de comunicación tras reunirse en el Palacio de Cibeles con empresarios madrileños, donde además de la contratación de esos 250 nuevos trabajadores, remarcó que se aumentará el presupuesto destinado a la empresa municipal y que “no hay ninguna intención” de privatizar la EMT.

Por ello, ante esta situación y, previstos unos paros para los próximos días y una huelga de 24 horas el próximo 3 de diciembre, el alcalde preguntó al Comité de Empresa de la EMT que qué está pidiendo.

“No tenemos ninguna reivindicación, no sabemos que es lo que están pidiendo y qué es lo que justifica la huelga”, apuntó. En este sentido, respondió que, si la reivindicación era que el ayuntamiento no contrataba conductores, “vamos a contratar 45 más de lo que estaba previsto por el equipo de Gobierno anterior”.

Por tanto, calificó la huelga de "política, arbitraria e injustificada” y añadió que dicha huelga “no solo perjudicará a los miles de madrileños, sino que el comité de huelga, en su afán de persecución política, que no de derecho de defensa de los trabajadores, está dispuesto a perjudicar la imagen de Madrid durante la Cumbre Mundial del Clima”.

Ante esta situación, el regidor madrileño remarcó que “bajo el chantaje y las presiones injustificadas, no negociamos”, sino que “negociamos en clima de buena fe y donde se nos diga qué están pidiendo”. Almeida comentó que el comité de empresa “se está quedando sin excusas para sostener una huelga sin argumentos”.

Por último, remarcó que si el comité de huelga y los sindicatos convocantes “quieren hacer un ejercicio de buena fe con el equipo de Gobierno que ha entrado hace apenas cuatro meses, lo mejor que pueden hacer es desconvocar la huelga”. En ese momento, concluyó, “no tendremos ningún inconveniente en que nos presenten las reivindicaciones y sentarnos a hablar”.