Así lo señaló durante una conferencia impartida en el marco de la Cátedra La Caixa Economía y Sociedad titulada ‘Calidad Institucional: exigencia prioritaria de la democracia’, en la que analizó cómo la calidad democrática, calidad institucional y bienestar se retroalimentan conformando un círculo virtuoso que afianza los estados democráticos modernos.

Escrivá subrayó que aunque España está entre los países más descentralizados por el lado del gasto, tiene "deficiencias en su marco de descentralización, como una distribución competencial difusa con normas poco precisas para una misma competencia, un diseño institucional y proceso de toma de decisiones que no está orientado al consenso ni a la cooperación y un marco de disciplina fiscal que dificulta el cumplimiento de las reglas fiscales".

En este sentido, el presidente de la institución consideró necesaria "una reforma integral que mejore la articulación entre los distintos niveles de la administración, con un marco competencial preciso y detallado, instituciones y procesos de toma de decisiones que alineen incentivos hacia cooperación, consenso y corresponsabilidad que complemente el autogobierno con el gobierno compartido, un marco de disciplina presupuestaria y de reglas fiscales, el diseño adecuado de los sistemas de financiación y conferencias sectoriales que verdaderamente actúen como una red de órganos especializados".

Por otro lado, durante su intervención Escrivá explicó que el modelo del Estado democrático moderno se fundamenta en tres pilares que conforman un círculo virtuoso: calidad democrática, calidad institucional y bienestar, y señaló que, dentro de la Unión Europea, “España está en una posición intermedia en estos tres pilares, aunque algo más lejos de la media en calidad institucional”. En concreto, destacó que “en España la confianza en las instituciones está en la media europea, pero la confianza en los poderes democráticos está por debajo”.

En este sentido, el presidente de la Airef señaló que “existe margen para mejorar el marco institucional español, que es un pilar básico como garante del bienestar y de la calidad democrática”, y apuntó que "un marco institucional de calidad conlleva transparencia y legitimidad democrática", mientras que "la calidad institucional contribuye a generar crecimiento a medio y largo plazo, lo que mejora el bienestar económico y social del país".

Así, Escrivá destacó el desarrollo de una administración con políticas bien diseñadas y evaluación continua de resultados, el impulso de instituciones independientes eficientes y bien diseñadas y una mejor organización territorial del Estado, como "palancas institucionales que pueden reforzar" la calidad democrática e institucional.

Para contar con políticas bien diseñadas, explicó, "es necesario reforzar la evaluación ex ante y elevar la calidad normativa, así como una evaluación ex post que permita un análisis continuo de los resultados".