En su discurso, plenamente en inglés, ya que la Conferencia del Clima la ha organizado Naciones Unidas, Felipe VI aseveró en el Salón de las Columnas del Palacio de Oriente que "no podemos ni debemos fracasar a la hora de dar al mundo una respuesta efectiva, ambiciosa y multilateral al mayor peligro medioambiental, social y económico que se cierne sobre los seres humanos y el planeta".

El monarca también advirtió de que "ninguna frontera puede protegernos de los efectos del cambio climático", por lo que pidió acción ante este problema. "No podemos retrasarnos a la hora de tomar decisiones: debemos actuar con liderazgo y decisión", dijo.

Ante los pronósticos negativos que dicen que ya es tarde para salvar el planeta, don Felipe enfatizó que "sí, aún estamos tiempo, pero no hay tiempo suficiente para la duda. Sí, hay esperanza, pero también mucho trabajo por hacer y, muy probablemente, muchas generaciones deberán recoger el testigo para completar" este ingente trabajo.

El Rey también destacó la importancia de este evento climático mundial que acoge España porque Chile no ha podido hacerlo por los disturbios que vive el país andino. "Desde España somos plenamente conscientes de nuestra responsabilidad al acoger un evento tan excepcional. Dando todo lo que está en nuestras manos os podemos ofrecer un espacio adecuado para un diálogo y participación constructivos para afrontar juntos uno de los grandes retos a los que se enfrenta la humanidad: la lucha contra el cambio climático".

TRANSFORMACIÓN ECONÓMICA

Abogó el Rey por una necesaria transformación de la economía y de los modelos de producción para lograr frenar el cambio climático.

Por su parte, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, destacó "la gran capacidad de improvisación de España, para acoger la COP25 en un tiempo récord. "Todo es tan eficaz que creo que la cumbre será un éxito a pesar de la complejidad de las negociaciones".

"El clima de Madrid nos va a impulsar. Gracias por el empeño demostrado de España. Gracias Majestades y al pueblo español por este acogida", concluyó el secretario general de la ONU.

Antes del discurso del Rey, don Felipe y doña Letizia saludaron en la saleta Gasparini a algunos de los invitados a la recepción, como el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y su mujer, Begoña Gómez; el príncipe Alberto de Mónaco; el presidente de Argentina, Mauricio Macri; el presidente de Ecuador, Lenin Moreno; o el primer ministro de Portugal, Antonio Costa; entre otros.