Sevilla (Bankia) pide un “debate” en Europa sobre los efectos reales de los tipos negativos

MADRID
SERVIMEDIA

El consejero delegado de Bankia, José Sevilla, instó este martes a abrir en Europa un “debate” sobre los efectos que la política de tipos negativos provoca y apuntó la decisión de algunos bancos centrales de revertirla o mitigar sus impactos.

Durante el ‘XV Encuentro del Sector Bancario’ organizado por el IESE con el patrocinio de EY, aludió a título ilustrativo que el Banco Central de Suecia ha anunciado hace poco más de un mes que abandonará los tipos negativos “porque empieza a leer que los efectos negativos están siendo superiores a los efectos potencialmente positivos”.

“Creo que ese es un debate que tenemos que tener en Europa”, defendió y recordó al respecto que, a pesar de la japonización de la economía nipona, su propia autoridad monetaria “ha compensado a los bancos por un importe mayor” del arbitrado por el Banco Central Europeo (BCE) para no dañar el crédito.

Su mención se produce después de que el BCE decidiese incorpora a su paquete de estímulos de septiembre el llamado ‘tiering’ por el que exonera a los bancos de pagar por sus reservas y parte de la liquidez el 0,5% con que grava los recursos dejados en su ventanilla. En otras jurisdicciones existe este esquema por umbrales superiores al aprobado por el BCE.

Durante su intervención Sevilla admitió que la política acomodaticia del BCE “ha tenido grandes ventajas” que nadie niega, pero alertó de que su mantenimiento en el futuro empieza a generar “algunos efectos negativos o no deseables”.

Al respecto recordó que en 2020 se irá ya para cuatro años la situación de tipos negativos creada en el año 2016 para perjuicio de la cuenta de resultados de los bancos y avisó de que podría generar “ciertas burbujas” por la búsqueda por parte de los inversores de rentabilidades a su patrimonio. “Nos afecta a la rentabilidad”, sintetizó y señaló que también supone un desincentivo claro “al ahorro a largo plazo y España es una economía que necesita ahorro”.

Sevilla admitió que el desafío “obliga a gestionar esta situación”. Una palanca a su juicio para actuar son los costes como ya hizo Bankia al fusionar BMN y que le ha permitido cosechar sinergias “de alrededor de los 200 millones”, importe equivalente al 50% de la base de costes original de la entidad integrada.

De forma adicional se mostró persuadido de que las entidades deben abrazar un “replanteamiento del modelo de negocio” y pasar del concepto de clientes de siempre a que sean la base del negocio y se busque rentabilizar su posición. “Sin cliente no hay nóminas y sin clientes el banco no tiene sentido”, dijo.

En este sentido abogó por buscar “una mayor vinculación de clientes y una mayor rentabilidad de los clientes”, que es el proceso en el que indicó que se ha posicionado Bankia.

Durante su intervención reconoció, por otro lado, el reto que representa restañar la imagen del sector, afectada por temas reputacionales y los numerosos litigios legales.

BANCA RENTABLE

Sevilla aseguró que “todos” deben involucrarse en mejorar la percepción de la industria porque es necesario que “la sociedad perciba que los bancos somos útiles” para que funcione, para que el sector rente y cumpla con su función social de financiar la economía.

“Si alguna industria o sector deja de ser útil por parte de los clientes dejará de existir en el medio plazo”, alertó. Así conminó a trabajar para “transmitir que aporta muchas cosas y somos útiles”.

“Necesitamos generar más beneficios para cumplir la función social”, refirió, lamentando que es algo que, sin embargo, “la sociedad no acaba de visualizar” y “no hay recetas mágicas ni soluciones a corto plazo”.

En clave positiva subrayó que la crisis ha provocado un cambio radical en las políticas de comercialización de productos, actualmente mucho más reguladas y porque “todos hemos entendido que la comercialización de productos es importante y tenemos que hacerlo bien”.

Según matizó no es un problema exclusivo de España como lo prueba los costosos litigios por seguros de protección de pagos en Reino Unido o con hipotecas indexadas al francos suizos en otras jurisdicciones. Se mostró confiado además de que la regulación adoptada en los últimos años “deberían permitir una relación de más transparencia, más regulada y que genere menos dudas interpretativas ente el banco y cliente”.

(SERVIMEDIA)
03 Dic 2019
ECR/EOM/gja