Día Mundial del Suelo

La contaminación del suelo provoca una “reacción en cadena” hasta afectar a la salud humana, según Fundación Aquae

Madrid
SERVIMEDIA

La contaminación del suelo provoca una “reacción en cadena” que acaba afectando a la salud humana teniendo en cuenta, además, que el 33% de los suelos del planeta ya están degradados, lo que provoca que unos 815 millones de personas sufran inseguridad alimentaria y aproximadamente 2.000 millones no dispongan de alimentos suficientemente nutritivos, según el último informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

Así lo puso de manifiesto este jueves Fundación Aquae a través de un comunicado, en el que puntualizó que sin suelos sanos "los alimentos no se pueden producir".

La presidenta del Consejo de Estrategia de Fundación Aquae, Mariola Urrea, calificó de “clave” la preservación de los suelos ya que estos retienen el triple de carbono que la atmósfera, filtran el agua e incluso mejoran la “resiliencia” ante inundaciones y sequías, y precisó que la contaminación del suelo daña a los microorganismos del suelo y afecta a la biodiversidad del suelo, reduciendo la materia orgánica que contiene y su capacidad para actuar como filtro.

También contamina el agua almacenada en el suelo y el agua subterránea y el aire por la volatilización de partículas tóxicas y supone un “grave riesgo” para la salud humana por contacto directo o indirecto, por el consumo de plantas o animales que han acumulado grandes cantidades de contaminantes del suelo.

"Cada uno de nosotros es un agente destacado en la protección y conservación del suelo”, defendió Urrea, para, a continuación, señalar que consumir alimentos sostenibles; reciclar adecuadamente desechos peligrosos como las baterías o los medicamentos o hacer compostaje en casa para reducir la cantidad de desechos que se llevan a los vertederos son “solo algunos ejemplos de cómo podemos ser parte de la solución”.

Fundación Aquae puntualizó que el 95% de los alimentos se producen directa o indirectamente en los suelos y que el incremento de la población mundial hasta los 10.000 millones de personas en 2050 obligará a incrementar la producción de alimentos en un 60%.

A la luz de estos datos, Urrea estimó “evidentes” las “dificultades” que existirán entonces para garantizar la seguridad alimentaria en muchas regiones del planeta al reducirse el rendimiento y la calidad de los cultivos.

(SERVIMEDIA)
05 Dic 2019
MJR/pai