Aunque todavía se están sopesando varias vías para la repatriación, la portavoz afirmó que existe una “estrecha colaboración” entre el Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación español y el gobierno francés para valorar la posibilidad de que los ciudadanos españoles que están en China sean repatriados a través de “los dispositivos que va a desplegar Francia”, porque se considera el “vehículo más adecuado”.

“Esto significa que, en las colaboraciones en el marco de la repatriación, probablemente se aconseje que sea en el vuelo francés donde nuestros compatriotas sean repatriados. Se está discutiendo”, aclaró María Jesús Montero en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.

Además, en las medidas desarrolladas para la repatriación se contemplan medidas específicas de “prevención y protección” para que los ciudadanos vuelvan “en condiciones adecuadas” y “no haya ningún problema”.

El objetivo es que los traslados se produzcan “en amplias condiciones de seguridad”, por lo que los viajeros se someterán a los “procedimientos” que los expertos establezcan.

La portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, recordó y destacó que en España “no se ha diagnosticado ningún caso de la infección”. “Todos los casos sospechosos han seguido un procedimiento y finalmente han sido descartados de que estuvieran desarrollando la enfermedad”, puntualizó.

Además, indicó que el Gobierno español “está actuando en colaboración” con países de la Unión Europea. También está siguiendo protocolos de actuación y de información y mantiene una “estrecha colaboración” con el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades, que tiene sede en Estocolmo (Suecia).