La Audiencia Nacional juzgará el viernes a los hermanos Salazar por el agujero de Sos Cuétara

MADRID
SERVIMEDIA

La Audiencia Nacional juzgará a partir del próximo viernes a los hermanos Jesús y Jaime Salazar Bello como máximos accionistas y gestores de Sos Cuétara, el grupo de alimentación origen de la actual Deoleo. La Fiscalía pide para ellos 30 años de prisión por el agujero de 250 millones que dejaron en la empresa.

Se les acusa de presuntos delitos delitos de estafa, blanqueo de capitales, delito societario, encubrimiento, administración desleal e insolvencia punible por la gestión de la compañía entre 2007 y 2009.

La Fiscalía cree que los acusados utilizaron una serie de sociedades vinculadas para, supuestamente, desviar fondos de la compañía. El epicentro del entramado sería la sociedad Cóndor Plus, controlada por Jesús y Jaime Salazar. En las cuentas del ejercicio 2008 se reflejó un crédito concedido por Sos Cuétara a esta mercantil por valor de 205 millones. Entonces, ambos sumaban el 30% del capital del grupo alimentario. Jesús era consejero delegado y presidente, y su hermano, vicepresidente.

Cóndor Plus cedía el dinero a otra mercantil de los Salazar, Unión de Capitales, y ésta lo distribuía entre otra serie de empresas vinculadas al grupo. Las defensas sostienen que esta estructura sirvió para facilitar la llegada al capital de la empresa del fondo soberano libio, que se comprometió a adquirir en 2008 el 29,9% de las acciones del grupo, siempre que una parte de ellas procediesen del mercado.

Supuestamente, esas sociedades se dedicaron a acumular títulos de Sos en Bolsa con esos 205 millones para después venderlas al fondo libio, que se esfumó a escasos días de cerrar el acuerdo, dejando en el limbo esas acciones. Éstas se mantuvieron intactas durante años perdiendo su valor. El consejo de administración acabó destituyendo a Jesús y Jaime Salazar el 30 de abril de 2009 y les llevó a los tribunales, reclamando una indemnización de 250 millones de euros.

(SERVIMEDIA)
09 Feb 2020
SGR/ecr