Así consta en un informe realizado por UGT con motivo de la conmemoración el próximo 22 de febrero del Día internacional de la igualdad salarial, en el que indica que las mujeres han dejado de ganar 43.454,5 millones de euros, equivalente al 4% del PIB anual de España, y cifra por la que, recuerda el sindicato, se deja de cotizar a la Seguridad Social y Hacienda. Además, multiplicando dicha cantidad por 35 años de vida laboral, el montante asciende a 1,5 billones de euros, equivalente a todo el PIB español de 2019.

Según el informe, presentado por Antoñanzas, en 2017 la brecha salarial se situó en el 21,99%, con las mujeres ganando al año casi 6.000 euros menos que los hombres.

El informe, además, destaca que una de cada cinco mujeres con empleo percibe, como máximo al mes, 707,70 euros brutos mensuales, equivalente al Salario Mínimo Interprofesional del año 2017, y que, además, sólo 36.809 mujeres acceden a los salarios más altos, frente a 105.807 hombres, de forma que, por cada tres hombres con salarios superiores a los 89.170,20 euros brutos anuales, sólo hay una mujer.

Para la vicesecretaria de UGT, “hay que romper con algunos mantras que son falsos, como que las mujeres estamos menos formadas que los hombres”, ya que, recuerda, un 48% de las mujeres con empleo en 2017 poseían un título universitario, mientras que, en el caso de los hombres, solo el 37,82% poseía una licenciatura o un grado. Sin embargo, solo el 1,81% de las mujeres asalariadas consiguen llegar a ser directoras y gerentes, frente al 3,18% de los hombres asalariados con la misma ocupación.

Asimismo, el sindicato también niega la excusa de que las mujeres trabajen menos horas que los hombres, poniendo como ejemplo que en las Actividades Sanitarias y de Servicios Sociales, las mujeres son el colectivo mayoritario y, aunque trabajan de media semanal 2,5 horas menos que los hombres, ganan casi 10.000 euros menos al año que ellos.

Así, durante la presentación, Antoñanzas recordó que “los empleos son peores para las mujeres que para los hombres”, y que “abunda el empleo a tiempo parcial en las mujeres, algo que penaliza doblemente a este colectivo, durante su vida activa por los bajos ingresos y, después de la jubilación, por los requisitos exigidos para percibir una pensión”. En concreto, según los datos aportados por el sindicato, una de cada cuatro mujeres con empleo, el 25,93%, tiene un trabajo a tiempo parcial, por el 7,48% de los hombres.

Además, mientras el 77,25% de las mujeres tienen un empleo a jornada completa, en el caso de los hombres es el 95,92%; y la brecha salarial en la contratación indefinida es más de dos puntos superior a la media (23,45%).

Por sectores, las brechas más altas afectan a las Actividades administrativas y servicios auxiliares, Otros servicios, Actividades profesionales, científicas y técnicas y a las Actividades sanitarias y de servicios sociales, ya que las trabajadoras de estos cuatro grandes sectores perciben un tercio del salario menos que sus compañeros varones. Las trabajadoras de la Hostelería perciben los salarios más bajos, con una brecha de casi 3.000 euros anuales respecto a sus compañeros.

Por regiones, Asturias mantiene la brecha más alta de toda España, del 30,24%, donde las mujeres cobran casi 8.500 euros menos que los hombres al año. Por el contrario, las comunidades con la brecha más baja son Canarias (11,15%) y Baleares (13,05%).

Por ello, Antoñanzas afirmó que “ahora tenemos la oportunidad de impulsar una Ley de Igualdad Salarial negociada y acordada con los interlocutores sociales, con un presupuesto económico suficiente para implementarse de manera eficaz; que incluya la creación de Comités de Brecha Salarial de Género, a imagen de los Comités de Seguridad y Salud en el Trabajo y de la figura de la Delegada de Brecha Salarial; que recoja un desarrollo reglamentario exhaustivo de las Auditorías Salariales; que contenga medidas que permitan la equiparación de los mismos derechos del trabajo a tiempo completo para el trabajo a tiempo parcial; y que incentive medidas dirigidas a la promoción de mujeres en todos los sectores de actividad”.

Además, señaló como “imprescindible” la creación de escuelas infantiles de 0 a 3 años, con carácter público, gratuito y de calidad; y “un sistema de cuidados de calidad, atendido por personas profesionales, que atiendan a las personas en situación de dependencia y discapacidad, con el fin de evitar el abandono del empleo de las mujeres para dedicarse al cuidado de las personas dependientes”. También reclama que “con carácter inmediato, el Gobierno arbitre el sistema para que las mujeres puedan sumar a sus cotizaciones a la Seguridad Social del periodo de prestación social realizado durante el franquismo, más aún tras la reciente sentencia del Tribunal Supremo que así lo reafirma”.

NO HARÁ HUELGA EL 8M

Por otro lado, la representante de UGT señaló que el sindicato no hará huelga feminista el próximo 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, pese a considerar que “una huelga es una herramienta fundamental para poder cambiar las cosas” por que “hemos creído conveniente abordar el problema de otras maneras”.

En este sentido, aseguró que “es necesario buscar nuevas fórmulas de presión y negociación”, por lo que UGT abordará “una campaña potente”. “Para nosotras, todos los días son 8 de marzo” declaró Antoñanzas, que agregó que “las discriminaciones que sufrimos las mujeres se deben abordar todos los días del año”.

Así, desveló que el lema de la campaña de UGT será Con motivo de este día, ha desvelado ‘8 de marzo, ¿y el 9 qué?’, y que el sindicato realizará asambleas por toda España el 5 y 6 de marzo para exponer la posición al respecto.

“Estaremos siempre apoyando a todos los movimientos feministas, que trabajan por la igualdad entre hombres y mujeres; pero desde UGT queremos dejar claro que el sindicato lleva 132 años trabajando por la igualdad y que vamos a seguir trabajando en el ámbito laboral para erradicar esta lacra, porque si no tenemos igualdad en el trabajo no los tendremos en otros ámbitos”, concluyó.