Así lo afirmó durante su primera comparecencia en la Comisión de Ciencia, Innovación y Universidades del Congreso de los Diputados para exponer las líneas generales de su cartera y que ha sido una de las pocas apariciones públicas de Castells desde que tomó posesión de su cargo hace más de un mes. “Si no comunico más es porque estamos trabajando. Producción antes que comercialización”, aseguró.

Según detalló el ministro, para alcanzar ese gran pacto ha iniciado una ronda de visitas “de nueve de la mañana a nueve de la noche” y “con cuatro bocadillos” a las 50 universidades públicas españolas, que inició hace unos días en la del País Vasco y continuará por las de Barcelona, la UNED y la Universidad de Extremadura.

El plan es visitar una universidad “a la semana”, aunque matizó: “Claro que voy a escuchar a las privadas”. Pero esgrimió justificó su tendencia a la educación pública: “Las públicas las pagamos todos, en ellas estudia el 82% de los estudiantes”.

“En 2021 iniciaremos un proceso más amplio de consulta sobre los contenidos posibles del pacto por la universidad”, añadió, en el Castells se verá con actores sociales, políticos, sindicatos, parlamentarios, comunidades autónomas y la sociedad civil “en su diversidad”.

El ministro también manifestó que sus propuestas responden al “cumplimiento estricto” del programa de la coalición progresista y que, por lo tanto, revisará las becas para que se consideren “derecho subjetivo”. Estas becas, añadió, en las que trabajará con el Ministerio de Educación se conocerán “antes del comienzo de curso” y mantendrá a los alumnos “informados”.

FUERA HORQUILLAS

Además, se comprometió a intervenir en las políticas universitarias, aunque estén transferidas a las Comunidades Autónomas. “Vamos a hacer lo que podamos”, dijo, antes de anunciar que también reducirá las tasas universitarias. “¡Fuera horquillas!”, zanjó, con la idea de establecer “un máximo” y “no un mínimo” en la horquilla de los precios de los universitarios.

Castells también anunció que “en esta legislatura” quiere acabar con "la precariedad actual" de profesores e investigadores universitarios, pues es “un escándalo y un despilfarro de recursos y un mecanismo de frustración para los jóvenes investigadores que se encuentran en trabajos inestables”. “Vamos a cancelar los falsos contratos de asociados, en cuanto aprueben la ley”, emplazó a los diputados.

El ministro de Universidades también adelantó que “en marzo” entrará “en fase consultiva acelerada” el texto del Estatuto de personal docente e investigador” para impulsarlo “lo más deprisa posible”, pero, a la vez “hacer algo serio”, teniendo en cuenta los condicionamientos legislativos y presupuestarios.

Además, anunció que quiere vincular las enseñanzas artísticas superiores al sistema universitario, a partir de un sistema de reconocimiento de la agencia de acreditación de méritos universitarios (Aneca) y en colaboración con el Ministerio de Educación.

El abandono de los estudios universitarios; el organismo de coordinación con el Ministerio de Ciencia e Innovación (con cuyo titular dice mantener buen “feeling”); una universidad 'online' “de calidad” y no “puras estafas”; actuaciones para llevar la universidad a la España vaciada, y el impulso del papel de la mujer en la universidad y de las tecnologías, será otros de los asuntos que piensa abordar.