Así lo dijo a Servimedia la religiosa Pepa Torres en el contexto de la celebración del Día Internacional de la Mujer, que se conmemora el 8 de marzo.

Torres, aseguró que acudirá a las marchas del 8-M junto a los colectivos de mujeres de los barrios, “especialmente las mujeres migradas y las trabajadoras del hogar”. “Esta reivindicación de los cuidados es fundamental, también en la Iglesia. Lo que no puede ser es que los cuidados siempre los tengamos que asumir las mujeres, feminizados, devaluados e invisibles, eso también vale para la Iglesia”, argumentó.

Por su parte, la veterana profesora y celebradora de la Palabra María África de la Cruz, lamentó que “es una pena” que las posibilidades de la mujer “no tengan oportunidad de desarrollarse” en el seno de la Iglesia. “Se quedan muchas en la cuneta”, indicó.

“Como mujer, revindico que la sociedad tiene derecho a tener el fruto que nuestra capacidad podría aportarla. Luego, como miembro de la Iglesia, yo amo a mi Iglesia y por eso estoy aquí, para demostrar que ya, en el presente, otra Iglesia está siendo posible: una Iglesia servidora de la humanidad. Como mujeres somos un patrimonio de la humanidad”, indicó.